El Consejo de Informativos de Televisión Española ha difundido este viernes un comunicado en el que se muestra crítico con el deterioro de la imagen que podrían sufrir los noticiarios de la corporación como consecuencia del programa La familia de la Tele. En el texto, urge al presidente, José Pablo López, a que actúe para evitarlo.

Lo hace después de detectar que la productora del programa -La Osa Producciones- envió este jueves a una de sus colaboradoras a Roma para seguir el proceso de elección del nuevo papa.

"Ni el tono ni la forma de este programa es lo que se espera de una televisión pública en un evento de esta importancia. Nuestros profesionales y nuestros espectadores
merecen respeto", exponen en el comunicado, en el que lamentan que la citada persona llevara un micrófono de la televisión pública en las manos.

1,3 millones de espectadores

"Los profesionales de la información de esta casa llevan largas jornadas en Roma informando con seriedad y rigor sobre el cónclave por la elección del nuevo papa", recuerdan en el comunicado; y, ciertamente, los diferentes profesionales de RTVE se han movilizado estos días en diferentes puntos de Roma y de El Vaticano y este jueves consiguieron la emisión más vista de la tarde.

Los miembros del Consejo de Informativos valoran en su comunicado el esfuerzo que han realizado, así como la rápida reacción de los programadores de la casa, que elaboraron un especial informativo justo cuando se conoció el desenlace del cónclave.

Ese especial obtuvo el 14,5% de cuota de pantalla y 1,3 millones de espectadores. Ahora bien, los trabajadores de la casa lamentan que haya estado salpicado por el programa La familia de la tele, contratado por López.