Cuando el lunes Santos Cerdán entró en la cárcel de Soto del Real, apenas pudo quitarse la corbata, soltar el efectivo que llevaba encima y la alianza cuando le avisaban de que tenía visita. Era su abogado, Benet Salellas, pero no estaba sólo. A su lado, otro letrado, con barba canosa, gafas circulares y poco pelo. Era Jacobo Teijelo, quien saltó a los medios de comunicación semanas antes por formar parte de un supuesto equipo del PSOE para desmontar causas judiciales.

Teijelo es "como todos los asturianos, un poco raro", pero "muy muy buen penalista", explica una persona que lo ha tratado en los últimos meses. Aunque parezca que mediáticamente nació cuando se filtró una reunión que mantuvo junto a la conocida como fontanera de los socialistas, Leire Díez, el letrado lleva estando en causas mediáticas desde hace casi 30 años.

Lejos del perfil reservado, Teijelo se mueve en zonas grises donde el escenario legal y el político convergen. Hay quien lo define como un "fontanero legal" dispuesto a remover lodos mediáticos, lo cual naturalmente le ha granjeado defensores que valoran su audacia, y también críticos que lo señalan como un operador de cloacas.

Ha sido conferenciante en la Universidad Complutense y la Rey Juan Carlos, experto en compliance y criminología. En declaraciones públicas, Teijelo sostiene que no tiene vínculos partidistas directos —"no soy del PSOE, no he votado al PSOE"—, y argumenta que actúa por encargo profesional.

La trayectoria de Jacobo Teijelo ilumina una realidad compleja del poder en España: en las líneas frontales del derecho penal se mueven no solo imputados e investigaciones judiciales, sino también intensas batallas políticas. Su clientela reúne desde figuras de la red criminal hasta dirigentes políticos, pasando por presuntos implicados en fraudes institucionales.

Casos mediáticos

En 1997 defendió a Exuperancia Rapú, la mujer que mantuvo un encuentro sexual con el director de El Mundo, Pedro J. Ramírez, para chantajearlo después. Teijelo no sólo fue su defensa, sino que soportó una agresión en sede judicial organizada por parte del abogado José Emilio Rodríguez Menéndez. Sobrevivió al juicio contra la "guerra sucia" de los años 90 .

También ha sido, o es, el defensor de personajes más que controvertido. En la actualidad defiende al narcotraficante Sito Miñanco, cuyo juicio en la Audiencia Nacional por la Operación Mito está a la espera de sentencia. Aquí ha cuestionado las escuchas con las que atraparon al célebre narco. Pero también llevó la defensa de Abu Dahdah, el líder de Al Qaeda en España, condenado por conspiración terrorista relacionada con el 11‑S.

Pero lo que ahora le ha puesto en el punto de mira, antes del asunto de Cerdán, han sido las investigaciones sobre fraude en el pago de impuestos de hidrocarburos. En la citada reunión con Leire Díez, ambos estaban hablando con el empresario Alejandro Hamlyn, investigado en una de esas causas. Le ofrecieron beneficios con la Fiscalía y con la Abogacía del Estado a cambio de cierta información.

Lucha contra la UCO

Especialmente, apuntaron contra el teniente coronel Antonio Balas, de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. Es el mando que está al frente de investigar delitos de corrupción como los que cercan al Gobierno. Pero también contra un capitán de la misma unidad de élite, Juan Vicente Bonilla. Este agente era el responsable del equipo de Fuentes y quien recabó la primera información sobre las actuaciones del exasesor ministerial Koldo García.

El contenido del audio de 53 minutos desencadenó una tormenta política. El PP denunció los hechos ante la Fiscalía Anticorrupción por presuntos delitos de tráfico de influencias, cohecho, obstrucción a la justicia y pertenencia a organización criminal. Teijelo, sin embargo, calificó esas filtraciones como escandalosas.

Ahora, las visitas a la cárcel para ver a Santos Cerdán dejan la duda de si, en realidad, Teijelo siempre ha sido un abogado trabajando para el PSOE. Después de su encuentro, al día siguiente, también acudió una abogada que trabaja en su despecho, Marta Castro Varela. Esta mujer acompañó a Cerdán el lunes durante la comparecencia que le llevó a prisión, como ha publicado este periódico.