Avance de 'La Promesa' este miércoles 23 de julio

No es un número redondo, pero La Promesa cumple 640 entregas este miércoles 23 de julio. No lo hace en su mejor momento creativo, pero sí hay prometedoras tramas, como el idilio entre Manuel, Toño y Enora. No parece que el beso entre Toño y Enora vaya a desembocar en noviazgo. Enora no quiere que lo personal interceda en lo profesional. La balanza se inclinará hacia el heredero del marquesado de Luján, aunque no esté el horno para bollos. Manuel nunca dejará de querer a Jana y Enora no podrá reemplazar semejante amor.

Ver para creer la férrea defensa de Petra de sus compañeros de servicio al nuevo mayordomo. Ballesteros es aparentemente un perro sabueso y está dispuesto a ejercer su autoridad incluso en la cocina de Lope y Simona. María Fernández recibe la peor noticia posible sobre Samuel: nunca se personó en el obispado.

Pía caza a Curro besándose con Ángela y, aunque apoya su furtivo romance, advierte de las fatales consecuencias de que ser descubiertos. Ángela está dispuesta a tirar de la manta y exponer las malas artes de Lorenzo, principal sospechoso del asesinato de Jana.

Avance del capítulo 640 de La Promesa este miércoles 23 de julio

Toño se sincera con Manuel tras intentar seducir a Enora. El hijo de Simona no quiere que su jefe se haga ideas equivocadas. Toño no es un hombre infiel. Toño cree que Enora está enamorada de Manuel y así se lo hace saber.

Tras la recuperación de Rafaela gracias al doctor Guillén, el mismo que operó sin éxito a Feliciano (hijo de Petra), Catalina y Adriano ni perdonan ni olvidan el vacío de los médicos.

María Fernández comparte a Petra las últimas noticias sobre Samuel.

Ángela planta cara a su madre Leocadia: quiere continuar cuidado de Andrés. Ángela está decidida a hacer caer a Lorenzo, al marqués de Carril (el padre de Vera) y al marqués de Andújar, y así se lo hace saber a Pía.

Pía y Lope advierten a Curro: debe atemperarse o perderá su trabajo. Aún así, Ballesteros le ha tendido una mano al lacayo.

Santos admite ante su padre, Ricardo Pellicer, haber descubierto la verdadera cara de su madre.