Louis Vuitton, el emblema del lujo, revoluciona este jueves Barcelona con la presentación de su Colección Crucero 2025 en el Parc Güell. Éxito sin precedentes para los defensores del evento, que aseguran que el desfile convierte Barcelona en capital mundial de la moda por un día. Abuso sin precedentes para los vecinos del Parc Güell, que critican la cesión del espacio público por parte del Ayuntamiento, los problemas de movilidad originados y desperfectos en la emblemática obra de Antoni Gaudí.

La celebración de la Copa de la América en Barcelona explica la apuesta de Louis Vuitton por la capital catalana. Es también la excusa esgrimida por el gobierno local para avalar la celebración del desfile en el Parc Güell. Jordi Valls, teniente de alcalde de Promoción Económica, defiende el evento enmarcado en la celebración de la Copa de la América, declarado Acontecimiento de Excepcional Interés Público.

"Es una oportunidad para la ciudad" defiende Valls, entiendo las afectaciones para los vecinos, pero son afectaciones durante un día y medio". La portavoz de los vecinos, María Solanas, le respondía apuntando que "si es de interés para la ciudad que hagan público" el desfile. También se quejan los padres del colegio Baldiri Reixac, que se encuentra dentro del parque, afectados por el cierre del recinto tanto el miércoles como el jueves a partir de las 14.00 horas.

No es la primera vez que el recinto diseñado por Gaudí sirve de escenario de un desfile. Ya lo escogió Paco Rabanne para su show en 1970 y allí han tenido lugar sesiones de fotos de varias marcas, aunque nada de la envergadura de Louis Vuitton. El parque barcelonés se une al club de escenarios de lujo de la maison, que antes mostró sus colecciones de entretiempo en enclaves como el Museo de Arte Contemporáneo de Niterói (Brasil), el Palacio del príncipe de Mónaco, la isla Isola Bella (Italia) o incluso el Aeropuerto Internacional John F. Kennedy de Nueva York.

Daños en la obra de Gaudí

Las quejas de los vecinos se vieron avaladas por los daños ocasionados por los preparativos del desfile unas escaleras del Parc Güell que son Patrimonio de la Humanidad. "Un error humano durante las tareas de montaje ha provocado daños en un tramo de la coronación del muro de piedra próximo a la escalera que da acceso en la plaza de la Natura", reconoció el Ayuntamiento hace diez días.

Los desperfectos ya se han reparado, siguiendo las directrices de Patrimonio. La empresa "lamentó el incidente" y asumió los gastos de la reparación. Pero el incidente dio alas a las quejas de los vecinos, que este miércoles protagonizaron una cacerolada a las puertas del parque.

Desembarco de celebridades

No se perderá el desfile el consejero del grupo LVHM, Bernard Arnault, el hombre más rico del mundo según la revista Forbes. Y en primera fila han explicado que se puede esperar la presencia de "las amigas habituales de la casa", principalmente actrices de Hollywood, de Jennifer Conelly a Emma Stone o Ana de Armas, entre otras. Al último desfile Crucero, en Isola Bella (Italia), asistieron también personalidades como Oprah Winfrey, Chiara Ferragni o el director creativo de la división masculina de la casa, Pharell Williams.

El desfile de Barcelona ha llenado de celebridades los hoteles más lujosos de Barcelona. Especialmente el Mandarin Oriental, estratégicamente situado en el Paseo de Gracia, que ha registrado aglomeraciones de curiosos. De ahí que los representantes de la industria patria de la moda y el lujo saluden el show de Louis Vuitton en Barcelona como una oportunidad. Lo apuntaba Pilar Pasamontes, directora científica de Moda del Instituto Europeo del Diseño en declaraciones a Betevé: "El evento pone a Barcelona en el radar del mundo" y potencia "un turismo bueno, que no estropee las cosas".

La Sala Hipóstila del Parc Güell, con sus 86 columnas simulando un bosque de piedra será el escenario por el que desfilará la colección creada por Nicolas Ghesquière, el creativo de Louis Vuitton que firma la Colección Crucero. Louis Vuitton no adelantará el contenido a la prensa, así que hasta las 20:15 horas la colección es un secreto para todos.

Buena parte de las decenas de personas que llegaron hace una semana de las oficinas de la firma patrocinadora de la Copa América no solo se harán cargo del desfile sino del resto de iniciativas con las que quieren estar presentes en la ciudad hasta octubre, cuando el equipo que gane la competición de agosto desafíe a Nueva Zelanda, el último vencedor. Entre otras actividades, una exposición, una tienda efímera, una guía de viaje de Barcelona y una serie de programas educativos para apoyar la creatividad y el diseño en la ciudad.