Con la llegada del primer mes del verano climatológico, España se prepara para un junio que promete ser caluroso y con precipitaciones escasas, según el análisis de Samuel Biener, experto de Meteored (tiempo.com). Las previsiones apuntan a un ambiente muy cálido desde los primeros días del mes, especialmente en el interior peninsular, con posibles anomalías térmicas de hasta 6 ºC por encima de la media habitual.

Aumento marcado de temperaturas

Junio se caracteriza por el aumento progresivo de las temperaturas y la prolongación de las horas de luz. En el interior de la Península, la temperatura media puede subir entre 5 y 7 ºC respecto a mayo. En cambio, en las zonas costeras y los archipiélagos el ascenso térmico es más moderado gracias a la influencia de las brisas marinas.

En los últimos años, este mes ha sido testigo de varias olas de calor, y todo indica que este 2025 podría seguir esa tendencia. Las previsiones del modelo de referencia de Meteored señalan que, durante la primera quincena, se podrían registrar temperaturas entre 3 y 6 ºC por encima de lo habitual en regiones como Extremadura, norte de Andalucía, Castilla-La Mancha, Comunidad de Madrid, el sur de Castilla y León y áreas del interior de la mitad este.

En el resto del país, el incremento térmico sería algo más moderado, de entre 1 y 3 ºC, mientras que en Canarias y Baleares se espera que la desviación sea de entre 0,5 y 1 ºC. Para la segunda mitad del mes, las temperaturas seguirían por encima de la media, con anomalías de entre 1 y 3 ºC en gran parte del territorio, especialmente en zonas del interior peninsular.

Tormentas localizadas y precipitaciones escasas

Junio es también un mes marcado por la irregularidad de las lluvias. En el sur y en las islas, las precipitaciones suelen ser escasas, mientras que en el norte y las áreas montañosas se concentran en forma de tormentas intensas. En zonas del Pirineo, es común que se superen los 100 litros por metro cuadrado, lo que convierte a junio en uno de los meses más húmedos del año en sectores concretos del Pirineo y del Sistema Ibérico.

Según las proyecciones, la primera mitad de junio será más seca de lo normal en la mayor parte del país, aunque podrían producirse algunas precipitaciones tormentosas en áreas del norte y del interior este. Para la segunda quincena, no se observa una tendencia clara en cuanto a lluvias, aunque el posible paso de un chorro polar con ondulaciones podría generar algunas tormentas puntuales. También se anticipan ligeras anomalías húmedas en las islas occidentales de Canarias.