Tras unos días de calma aparente, España se prepara para una semana pasada por agua. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) confirman la llegada de una nueva borrasca atlántica que dejará lluvias persistentes, viento y un notable descenso de temperaturas.

Los meteorólogos insisten en que no se trata de un episodio pasajero. Esta borrasca forma parte de una cadena de frentes que se desplazarán desde el Atlántico hacia la península, afectando sobre todo al noroeste y centro del país.

¿Qué hay detrás de esta borrasca?

Uno de los protagonistas es el río atmosférico de humedad, una corriente de vapor de agua que viaja desde el océano y que, al encontrarse con la península, descargará lluvias intensas y continuas. En algunas zonas de Galicia, Asturias o Castilla y León podrían acumularse más de 200 litros por metro cuadrado.

La AEMET ha detallado que el frente será especialmente activo entre el miércoles y el sábado, cuando el chorro de humedad se estabilice sobre la península. Los mapas de precipitación muestran un panorama típicamente otoñal: cielos grises, chaparrones intermitentes y viento moderado a fuerte.

Pero no toda España vivirá el mismo guion. Mientras el norte y el centro estarán bajo el temporal, el sur y el este podrían mantener temperaturas altas para la época. En zonas de Andalucía y la Comunidad Valenciana se esperan máximas de hasta 30 °C, creando un fuerte contraste climático que recuerda a un "otoño partido en dos".

Cuándo y cómo golpearán los frentes

Los primeros efectos ya se han dejado sentir en el noroeste, con lluvias persistentes durante el fin de semana. A partir del lunes 20, cada frente irá cruzando la península, dejando cielos cubiertos y precipitaciones generalizadas.

El miércoles será el día clave, el río atmosférico intensificará las lluvias en Galicia, Cantabria y el norte de Castilla. Se esperan tormentas localmente fuertes y vientos que podrían superar los 80 km/h en zonas costeras.

Hacia el jueves y viernes, el temporal tenderá a debilitarse, aunque las lluvias seguirán apareciendo en el norte y en puntos del interior. En el sur, las nubes dejarán paso a claros, aunque con un ambiente más húmedo y pesado.

Impactos esperados y consejos prácticos

  • Lluvias intensas y persistentes: posibles inundaciones en zonas bajas y riberas de ríos.
  • Viento y oleaje: rachas fuertes en el litoral cantábrico y gallego, con mar alterado.
  • Desplazamientos difíciles: precaución en carretera por charcos, barro o escasa visibilidad.
  • Tormentas eléctricas: sobre todo en el noroeste peninsular y áreas montañosas.

La AEMET recuerda que las alertas pueden cambiar rápidamente, por lo que se recomienda consultar los avisos oficiales y seguir las cuentas meteorológicas verificadas.

Un otoño que por fin se hace notar

Después de un inicio de octubre más cálido y seco de lo habitual, esta borrasca marca un punto de inflexión en el tiempo otoñal. Los expertos aseguran que el Atlántico se ha "despertado", y que el flujo de borrascas podría continuar durante los próximos días.

Así que, aunque el paraguas vuelva a ser protagonista, hay un lado positivo, y es que, el agua será muy bienvenida tras semanas de sequía y reservas hídricas por debajo de la media.

El otoño, por fin, llega con lo que el caracteriza, cielos cubiertos, viento que mueve las hojas y el inconfundible sonido de la lluvia golpeando los cristales.