Las luces de la alfombra roja siempre alumbran más cuando aparece Jennifer López. Pero esta vez, su reaparición junto a Ben Affleck ha encendido titulares: ¿se trata de una nueva oportunidad para el amor? Lo que vimos el 6 de octubre en Nueva York fue mucho más que un posado: fue un símbolo cargado de emoción y de tensión entre lo que fue y lo que podría ser.

Jennifer López y Ben Affleck caminaron juntos frente a las cámaras en el estreno de Kiss of the Spider Woman, película protagonizada por JLo y de la cual Affleck es productor. Sus gestos fueron cuidados, las miradas cómplices, los silencios elocuentes. Para muchos, ese primer reencuentro formal tras su divorcio es el inicio de una nueva era: ¿Bennifer 3.0?

Un pasado que pesa, un presente que sorprende

La historia entre ellos es intensa. Se conocieron en 2002, se comprometieron, se separaron, tomaron caminos distintos, se reencontraron en 2021 y se casaron en 2022. Pero tras dos años juntos, JLo pidió el divorcio en agosto de 2024 y la separación quedó formalizada a principios de 2025, por “diferencias irreconciliables”.

Lo curioso: la grabación de Kiss of the Spider Woman comenzó justamente al inicio del año, cuando los procesos se estaban cerrando. Eso los obligó a trabajar juntos, juntos, incluso cuando ya no eran pareja. En el estreno, Lopez agradeció públicamente: “Gracias, Ben, esta película no se habría hecho sin ti ni sin Artist Equity”. Él, con respeto y admiración, se expresó con unas bonitas palabras : “Trabajó muchísimo… es alguien que creció viendo musicales clásicos”.

¿Amigos o algo más?

Las apariciones de Jennifer y Ben vuelven a levantar suspiros, pero quienes los vieron de cerca aseguran que el ambiente entre ellos fue más tranquilo que apasionado. No hubo grandes gestos de amor, pero sí una conexión que se siente, una complicidad que no se apaga con el tiempo.

En la alfombra roja se les vio conversando con calma, sonriendo y compartiendo miradas que parecían decir más que mil palabras. No hubo abrazos ni besos, solo gestos suaves que dejaron al público con la duda: ¿hay cariño o simple respeto?

Todo apunta a que, más allá de los rumores, Jennifer y Ben están en una etapa distinta. Han aprendido a llevarse con madurez, dejando atrás los reproches y enfocándose en lo que ahora los une: su trabajo, su historia y el cariño que, aunque ya no sea romántico, sigue presente. Dos personas que, pese a los altibajos, siguen encontrando la manera de coincidir sin perderse del todo.

¿Una nueva historia o un cierre elegante?

Este momento puede interpretarse de muchas formas. Si fueran guionistas de una película romántica, pondrían esta escena como: dos personas que se amaron, que sufrieron, que crecieron, que ahora se encuentran en un cruce de caminos. Podría ser un "quizás", o simplemente una despedida digna, con aplausos y sonrisas.

Lo más seguro es que esto no se resuelva en titulares. El amor entre JLo y Ben está hecho de historias, errores, magia, heridas y segundas oportunidades. No hay fórmulas, no hay manual. Tal vez ellos mismos prefieren dar pasos invisibles, lejos del ruido, y solo aparecer juntos cuando la película lo exige.

Lo que sí sabemos: esa noche de octubre encendió conversaciones. En redes, en prensa, en el corazón de seguidores que aún guardan la ilusión. La pregunta clásica vuelve: ¿están juntos? La respuesta hoy podría ser: no como antes, pero sí con algo compartido: un respeto que no pudo romperse del todo.