Eduardo Casanova ha anunciado este jueves que tiene VIH en una publicación en redes sociales en la que ha explicado que rompe “este silencio tan desagradable y doloroso después de muchísimos años”. El actor, director y guionista, de 34 años, ha hecho público su diagnóstico a través de un mensaje en Instagram en el que subraya que lo hace “cuando yo quiero, cuando yo puedo” y con la convicción de que la dignidad “debería ser la forma en la que todas las personas con VIH pudieran salir del armario”.

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“Pese al miedo y la incertidumbre, hoy me siento profundamente feliz”, ha escrito Casanova, que ha señalado también que cerca del 80 % de las personas con VIH no ha compartido con casi nadie que tienen la infección “por un estigma que nos condena al rechazo sistemático y más injusto del mundo”. Un silencio que, según ha remarcado, guardan y sufren “muchísimas personas” y que él ha decidido romper ahora, cuando ha querido y ha podido.

Documental sobre su vida dirigido por Jordi Évole

El anuncio se ha producido junto a un adelanto de un documental sobre su vida dirigido por Jordi Évole, que se estrenará en 2026. “Lo hago por mí, pero deseo que esto pueda ayudar a más gente. Lo hago a mi manera, a través del cine, que es mi forma de comunicarme”, ha añadido el cineasta, que ha precisado que “ya habrá tiempo para explicar más cosas”.

El mensaje ha recibido una amplia muestra de apoyo, tanto de asociaciones como Apoyo Positivo como de compañeros de profesión, entre ellos Leticia Dolera, Hugo Silva, Raquel Meroño o Miguel Diosdado. Casanova se dio a conocer como Fidel en la serie Aída y el pasado 1 de diciembre ha estrenado Silencio, una miniserie que aborda la pandemia del VIH a través de una historia de ficción. En declaraciones recientes, el director ha señalado que “existe todavía una gran serofobia, pese a que la medicina ha avanzado mucho”, y que el estigma social asociado al VIH sigue siendo muy similar al de los inicios de la pandemia.

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