La entrega de 20 rehenes israelíes vivos, tras 783 días de cautiverio, ha marcado la mañana de este lunes la primera fase del acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás: 20 rehenes israelíes vivos, todos ellos varones, son entregados este lunes al Comité Internacional de la Cruz Roja en el norte de Gaza. Hacia las 8.00 hora local, han sido liberados los primero siete secuestrados. Posteriormente, los cautivos serán trasladados a Israel para su atención médica y el reencuentro con sus familias.

El canje estipulado no se limita a los rehenes israelíes. Israel liberará a 1.966 presos palestinos, incluidos 250 con largas condenas, además de 1.700 gazatíes arrestados desde el estallido de la guerra el 7 de octubre de 2023. Otros 28 rehenes israelíes muertos deben también ser entregados, aunque Hamás y el resto de facciones palestinas operando en Gaza podrían tener problemas para localizarlos tras dos años de ofensiva que ha matado a más de 67.000 personas y reducido a escombros el enclave palestino.

En un comunicado, el Comité Internacional de Cruz Roja ha informado "haber dado inicio a una operación en varias etapas para facilitar la liberación y transferencia de rehenes y detenidos". "Esta compleja operación, que responde a un pedido de las partes, es crucial para reunir a familiares que han quedado separados", señala. "Se trata de operaciones extremadamente complejas que requieren una meticulosa planificación logística y de seguridad a fin de minimizar el riesgo de vida para todos los que intervienen en ellas. Es responsabilidad de las partes en el acuerdo tomar todas las medidas necesarias para se lleven a cabo de manera segura y con dignidad. Desde octubre de 2023, en el marco de operaciones anteriores, el CICR ha facilitado la liberación y transferencia de 148 rehenes y 1.931 detenidos", agrega.

Vehículos del Comité Internacional de la Cruz Roja en Gaza, a la espera de la liberación de los rehenes

Entre los liberados figuran Yosef Chaim Ohana, Bar Kuperstein, Evyatar David, Segev Kalfon, Avinatan Or, Elkana Bohbot, Maxim Herkin, Nimrod Cohen, Matan Zangauker, David Cunio, Eitan Horn, Matan Angrest, Eitan Mor, Gali Berman, Ziv Berman, Omri Miran, Alon Ohel, Guy Gilboa Dalal, Rom Braslavski y Ariel Cunio, según una lista publicada por las Brigadas de Al Qassam, el brazo armado de Hamás.

En los días previos al intercambio, negociadores de Hamás e Israel han intercambiado listas de rehenes y presos para el canje, como confirmó un alto representante del grupo islamista. Según Haaretz, Hamás demandaba la inclusión de 21 presos de larga condena, 11 de ellos antes de los Acuerdos de Oslo, lo que ha sido objeto de intensa negociación. Los presos palestinos han sido trasladados a la prisión militar israelí de Ofer, desde donde partirán los autobuses hacia la Cisjordania ocupada y Jerusalén Este. Se espera que otro prisioneros palestinos sean liberados de la prisión de Ktzi'ot, en el Negev, para ir a Gaza o al exilio.

Sin embargo, no todos los nombres propuestos Hamás han sido aceptados. Israel rechazó liberar a Marwan Barghouti, dirigente de Fatah considerado un líder palestino carismático, pese a su relevancia simbólica y política dentro de Palestina. "Está claro que el Estado ocupante está tratando de eliminar nombres que se suponía que iban a ser liberados, nombres que figuran en la lista de personas que iban a ser liberadas de las prisiones israelíes. La ocupación tiene claramente la intención de manipular las listas", ha denunciado Ghazi Hamad en Al Yazira.

La cumbre en Sharm el Sheij

Tras el intercambio, la tarde de este lunes está prevista una cumbre internacional por la paz en la ciudad costera egipcia de Sharm el Sheij, coorganizada por Estados Unidos y Egipto, con la participación de más de 20 países y organismos como la ONU y la Unión Europea.

En la cita, los líderes esperan consolidar el alto el fuego, diseñar el plan de reconstrucción de Gaza y definir un mecanismo temporal de gobernanza en la Franja que incluya supervisión internacional. Pese al entusiasmo diplomático, Israel y Hamás no asistirán directamente a la cumbre. Israel mantiene su política de no negociar cara a cara con el grupo. Por su parte, Irán declinó la invitación, aunque su influencia regional será uno de los temas centrales en los pasillos diplomáticos.

Trump: "La guerra ha terminado"

La liberación de rehenes ha generado olas de alivio y celebración en Israel. En Tel Aviv, en la Plaza de los Rehenes, miles se han congregado con banderas y retratos, esperando el reencuentro. “Por fin podemos sonreír”, decía una mujer entre emoción y cansancio.

Pero el acuerdo refleja concesiones y tensiones. Israel insiste en mantener el control sobre la infraestructura estratégica de Gaza y en exigir la desmilitarización parcial del enclave, puntos que no han sido resueltos en Sharm el Sheij. Fuentes del gobiernos israelí se han mostrado partidarias de reanudar la guerra una vez completada la primera fase de liberación de los rehenes.

A bordo del Air Force One camino de Israel, el presidente estadounidense Donald Trump reiteró que “la guerra ha terminado” al ser preguntado por las declaraciones de Netanyahu sugiriendo una reanudación de la operación militar israelí. El presidente aseguró que “todo el mundo está celebrando, algo que nunca había pasado antes”. Agradeció a Netanyahu y a líderes de Qatar, Emiratos Árabes, Arabia Saudí, Jordania, Indonesia y Turquía su papel en las negociaciones. “Las cosas van a ir bien. Todos saben cuál es su lugar”, declaró con su habitual tono triunfalista.

El intercambio, sin embargo, no pone fin a las heridas abiertas. Netanyahu advirtió en un mensaje televisado que “la campaña no ha terminado” y que “nuestros enemigos siguen intentando reorganizarse”. En las calles israelíes, la alegría se mezclaba con la prudencia y el miedo a que el frágil alto el fuego no resista la presión de las facciones palestinas ni el peso de los intereses cruzados en la región.