Alemania se ha convertido en el primer país europeo en integrar el sistema de defensa Arrow 3 para interceptar misiles balísticos. Las primeras unidades se encuentra desde el miércoles en la base aérea de Holzdorf, al sur de Berlín. El objetivo es que Alemania esté preparada frente a la amenaza rusa.

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Esta adquisición formó parte del mayor acuerdo de defensa entre Alemania e Israel, por un valor de 3.300 millones de euros, firmado en otoño de hace dos años. Los herederos de los perpetradores del Holocausto y los descendientes de sus víctimas tienen ahora unos sólidos vínculos que se traducen en cooperación en aspectos fundamentales como la defensa.

"Por primera vez, tenemos la posibilidad de contar con un sistema de alerta temprana para proteger a nuestra población e infraestructura de los misiles balísticos de largo alcance", dijo el ministro alemán de Defensa, Boris Pistorius, sobre la activación del Arrow 3. "Así, reforzamos el pilar europeo de la OTAN y asumimos un objetivo de planificación de la Alianza", añadió Pistorius, según informa la agencia alemana Dpa. 

Brecha de seguridad en Europa

La OTAN había advertido de una brecha de seguridad en Europa, debido a que ningún país contaba con un sistema de defensa que pudiera neutralizar misiles balísticos a gran altitud. El Arrow 3 es una respuesta a la amenaza que representan los misiles modernos de largo alcance. Rusia posee misiles balísticos de largo alcance que pueden alcanzar altitudes extremas. En caso de crisis, representarían una seria amenaza.

Recordemos que varios institutos especializados en defensa apuntan que Rusia se plantea atacar algún país de la OTAN. De hecho, el líder ruso, Vladimir Putin, no lo descarta aunque siempre lo plantea a la defensiva. "Si Europa quiere luchar, Rusia está ya preparada", dijo Putin antes de hablar con los enviados de Trump sobre las negociaciones en relación con Ucrania. También Putin plantea su invasión de Ucrania como una operación en respuesta a la expansión de la OTAN. Es un pasivo agresivo de manual.

La invasión rusa de Ucrania ha llevado a que los países europeos se replanteen sus inversiones en defensa. En el caso de Alemania ha sido una Zeitenwende, un punto de inflexión, como dijo el entonces canciller federal Olaf Scholz en el Bundestag apenas tres días después de que empezara la invasión.

Alemania ha aumentado su inversión en defensa, y ha aceptado el objetivo del 5% del PIB como aprobó la OTAN en la cumbre de La Haya. También busca aumentar sus efectivos y sus reservas: va a introducir el servicio militar voluntario.

Contra amenazas de gran alcance y gran altitud

El sistema de defensa antimisiles Arrow 3, desarrollado conjuntamente por Israel y Estados Unidos, se encuentra entre los sistemas más avanzados del mundo en la interceptación de misiles balísticos intercontinentales. El sistema de defensa aérea IRIS-T cubre alcances cortos de hasta unos 15 kilómetros, y el Patriot, alcances medios de hasta unos 50 kilómetros; juntos, aseguran la cobertura de altitudes de hasta unos 50 kilómetros.

Alemania cuenta con dos sistemas Patriot operativos en el aeródromo de Rzeszów, en el sureste de Polonia, próximo a la frontera polaco-ucraniana. El aeropuerto es un importante centro logístico para la distribución de ayuda militar occidental a Ucrania.

El Arrow 3, por otro lado, protege contra amenazas de largo alcance y gran altitud. Puede interceptar misiles entrantes a altitudes de hasta 100 kilómetros con un alcance de hasta 2.400 kilómetros. Tecnológicamente es más avanzado que los Patriot o IRIS-T pero también su precio es mucho más elevado.

Consta de tres componentes móviles principales: un radar de alerta temprana para la detección rápida de trayectorias de vuelo, un sistema de gestión para analizar amenazas y determinar medidas de interceptación, y un lanzador móvil para los misiles interceptores.

Con el Arrow 3, los misiles son destruidos por impacto directo. Este método, denominado hit-to-kill, pretende alcanzar la ojiva cuando aún se encuentra en el espacio y evitar así que grandes restos caigan sobre zonas pobladas. Esto es posible gracias a un sistema de control de alta precisión: la ojiva corrige su rumbo de forma autónoma durante la aproximación utilizando sus propios sensores.

Protección completa en 2030

La primera base para el sistema de defensa antimisiles es el aeródromo militar de Holzdorf, cerca de Schönewalde, al sur de Berlín. Aquí se probarán el personal, los procedimientos y la integración en la red de defensa aérea de la OTAN. Habrá dos bases más en un futuro cercano en Baviera y Schleswig-Holstein. El sistema Arrow 3 alcanzará su capacidad de protección completa para 2030. 

Alemania se considera un centro logístico para la OTAN, ya que casi todos los "refuerzos" tienen que pasar por el país debido a su geografía, tal y como se recoge en el Plan Operativo Alemania (OPLAN DEU). El plan prevé el transporte de hasta 800.000 soldados de la OTAN a través de Alemania. De este modo, la protección eficaz contra los ataques con misiles no es sólo una precaución nacional, sino la defensa de las infraestructuras europeas.

El sistema Arrow 3 fue desarrollado conjuntamente entre Israel y Estados Unidos a raíz de la Guerra del Golfo de 1991 en la que Israel fue alcanzado por 39 misiles Scud procedentes de Irak, según la BBC. Los dos países acordaron desde entonces poner en marcha un sistema de defensa aérea que fuera capaz de neutralizar proyectiles a una distancia segura. Uno de los grandes avances en el Arrow 3, fabricado en conjunto por firmas israelíes y la estadounidense Boeing, es su guía a través de un radar de rayos X. En Alemania la Izquierda (Die Linke) argumenta que el sistema hace que Alemania esté más insegura, no más segura.

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