Pese a la borrasca Ana que ha pasado durante apenas 24 horas por la península ibérica, este 2017 es el año más seco en 40 años de registros. Los expertos dicen que los periodos de sequía son cíclicos, ya sucedió algo similar en 1981, 1983 y 1995 y que suelen durar de dos a tres años. Si es así, todavía nos queda año y medio de lluvias muy por debajo de lo habitual, el problema es que ya solo tenemos agua en los embalses hasta final de año. Ecologistas en Acción demuestran además los efectos del cambio climático y el aumento de la temperatura en los cauces de los ríos, debido a este efecto sus caudales se han reducido un 20% en los últimos 25 años.

No hay agua para 3,6 millones de hectáreas de regadío y seguimos a la cabeza de los países europeos por extracción de agua del subsuelo

Dos tercios de España están sufriendo sequía intensa y centramos la única esperanza de que termine esta amenaza mirando al cielo y no al suelo. El Gobierno aplica medidas excepcionales para otorgar ayudas a corto plazo, pero no se pone en marcha un plan más ambicioso para cambiar el rumbo de nuestra mala gestión del agua. ¿Cómo es posible que España disponga ahora de un 20% menos de agua que hace 30 años, y a la vez aumenten en más de un 20% las tierras de regadío? No hay agua para 3,6 millones de hectáreas de regadío y seguimos a la cabeza de los países europeos por extracción de agua del subsuelo, solo por debajo de Bélgica. La Agencia Europea del Medioambiente nos advierte que este uso excesivo de los acuíferos hace bajar los caudales de los ríos y deseca los humedales.

En cuanto al consumo humano tampoco somos un ejemplo, gastamos una media de 150 litros de agua por español y día, muy por encima proporcionalmente de Méjico, Australia y la mayoría de países centroeuropeos, aunque el país del mundo que consume mayor cantidad de agua por habitante sigue siendo Estados Unidos.

¿Qué hacemos entonces ante la falta de lluvia y el cambio climático? Sin duda cambiar de hábitos y tomar conciencia de que el agua es un bien preciado y escaso. Hay que aprender de la gestión que en pequeña escala ha hecho por ejemplo la ciudad de Benidorm, modelo de consumo para los expertos. Se consume hoy el mismo caudal de agua que en 1975 cuando la población se ha multiplicado por cinco y se cuadruplica los meses de verano. Hoy gastan un 25% menos de agua que hace 30 años. Por eso se ha ubicado en Benidorm el centro más pionero de España en investigación y gestión del agua, un laboratorio de ideas para dejar de malgastarla.

Donde más hay que incidir según los expertos de varias universidades es en los cultivos, que suponen un 70% del consumo, perdiendo por el camino hasta el 40% de agua. No hay que culpabilizar de la situación a los agricultores, al contrario, hay que ayudarles para cambiar tipos de cultivo y poner en práctica el riego por goteo. El Gobierno debe dejar de pensar a corto plazo, no tiene sentido que utilicemos agua potable en los inodoros de nuestras casas o en la industria, pudiendo hacerlo con agua reciclada, reutilizada.

Gastamos una media de 150 litros de agua por español y día, muy por encima de la mayoría de países centroeuropeos

Tomemos como ejemplo el país del mundo que ha gestionado mejor la falta de agua, Israel. Puede suministrar agua a ciudadanos y agricultura sin necesidad de que llueva. Con plantas desalinizadoras y conciencia pública se han convertido por necesidad en el líder mundial en reutilización del agua, reciclan el 80% del agua que consumen, en España tan solo un 17% y en Estados Unidos a penas un 5%. California ya está copiando las medidas tomadas por Israel, y es solo el principio. Cuarenta de los cincuenta estados norteamericanos tendrán problemas de abastecimiento de agua en los próximos diez años.

En España las desalinizadoras son la opción más cara y curiosamente han sido la primera opción de nuestros gobiernos. La de El Prat del Llobregat costó más de 230 millones de euros y nunca ha funcionado a máximo rendimiento por sus elevados costes. A menudo agricultores y ecologistas discrepan acerca de la solución, aunque la mayoría de expertos aseguran que no son necesarios más pantanos ni más trasvases en España. Es veinte veces más barato reutilizar el agua, que construirlos.

Dos terceras partes del planeta son agua, pero solo el 2,5% del agua de la Tierra es dulce, aunque los humanos somos agua en un 70%, es el recurso más amenazado del planeta.