La mejor sesión en casi seis años. Sus niveles más elevados desde mayo de 2015. Hyundai Motor Group ha vivido este martes una jornada de euforia bursátil en la que sus acciones se elevaron más de un 8,6%, hasta máximos desde 2011.

El desencadenante de este movimiento podría parecer fútil a primera vista. La compañía comunicó que comenzará a cobrar derechos de marca de otras empresas del grupo empresarial Hyundai Glovis y Hyundai Steel.

Aunque estos pagos resultan minúsculos sobre los ingresos totales del grupo, en el mercado se ha entendido el movimiento como un paso hacia la reestructuración del grupo. Este acuerdo "favorece el escenario para el pago de derechos si el fabricante de automóviles se convierte en una sociedad hólding", escribía Esther Yim, analista de Samsung Securities, en un informe citado por Barrons.

La compañía ha perdido un 36% de su valor en bolsa en los últimos cinco años

La buena acogida a la noticia representa un alivio en la tortuosa marcha bursátil de Hyundai Motor. La compañía ha visto diluirse más del 36% de su valor en los últimos cinco años, en medio de un declive de sus beneficios y márgenes. Los últimos resultados han agudizado el desánimo y las perspectivas no parecen favorables. Los analistas de Nomura consideran que la compañía sólo podrá lograr sus objetivos de ventas para este año sacrificando aún más sus márgenes operativos, que se encuentran en sus niveles más bajos desde 2008.

En Goldman, sin embargo, creen que la fortaleza del dólar y el éxito de los nuevos modelos de la marca podrían ayudar a estabilizar su negocio. Con todo, "el verdadero potencial alcista viene una posible reestructuración de la propiedad de los accionistas principales en Hyundai Motor, Hyundai Mobis y Kia Motors", señalan en el banco estadounidense.

Actualmente, Hyundai Motor es propietario del 33,9% del capital de Kia, que a su vez controla el 16,9% de Hyundai Mobis. Este último cierra el círculo, al poseer un 20,8% de los títulos de Hyundai Motor. La maraña se complica si se tienen en cuenta las participaciones cruzadas de Hyundai Steel, Hyundai Glovis y otras compañías del grupo.

"La compañía es parte una estructura de capital particularmente compleja y subóptima, y vemos un valor significativo que puede ser desbloquedo por la reestructuración", apuntan en Goldman. La firma estadounidense concede un 50% de opciones a una reestructuración de las participaciones del grupo en los próximos 12 meses, en la que Hyundai Motor tendría todas las papeletas para convertir en el hólding en torno al que se aglutinen el resto de firmas.

Las situación política y la posibilidad de que algunos inversores activistas estén presionando para que la compañía simplifique su estructura son señalados por Citi como algunos de los argumentos que podrían impulsar estos cambios.

Una estructura de capital más simple puede traducirse en mayores dividendos

Para los inversores, la operación podría conllevar un premio en forma de dividendos. Goldman estima que con una estructura de capital mejorada Hyundai Motor habría generado 12 puntos porcentuales más de CROCI (retorno efectivo sobre el capital invertido) cada año entre 2012 y 2015. "Reconocemos la posibilidad de que Hyundai Motor se revalorice si utilizara sus significativas reservas de efectivo como dividendos o para recompras de acciones", indican.

Hyundai tiene pues la oportunidad de poner un poco de orden en su estructura de capital. Una medida que difícilmente se traducirá en una mejora del complejo entorno de negocio al que se enfrenta, pero que puede hacer algo más agradable su imagen a ojos del mercado.

La mejor sesión en casi seis años. Sus niveles más elevados desde mayo de 2015. Hyundai Motor Group ha vivido este martes una jornada de euforia bursátil en la que sus acciones se elevaron más de un 8,6%, hasta máximos desde 2011.

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