Al presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, no le habrán faltado momentos para arrepentirse de la apuesta que su entidad hizo en 2015 para hacerse con el negocio del banco británico TSB. La operación, valorada entonces en unos 2.300 millones de euros, se convirtió pronto en una puerta abierta de par en par a los problemas.

Apenas un año después de la adquisición la inesperada victoria de los partidarios del Brexit en el referéndum sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea convirtió la presencia en el mercado británico en un negocio mucho más incierto.

Pero el verdadero quebradero de cabeza vendría algo más tarde, con el proceso de migración del sistema tecnológico de TSB al de Sabadell, que derivó en un caos que ha causado a la entidad española unos costes aproximados de 400 millones de euros y cuya factura podría aumentar si los reguladores británicos que estudian el caso deciden finalmente imponer una multa que algunos análisis estiman que podría alcanzar los 50 millones de euros.

Sabadell presenta este lunes un nuevo plan estratégico en Reino Unido con el que tratará de dar por cerrada la crisis de TSB

El agujero, por lo tanto, está aún pendiente de cerrar. No en vano, al cierre del tercer trimestre de 2019, Sabadell publicó unas pérdidas acumuladas en el año de 5 millones de euros en su negocio británico. Pero tras estas cifras se escondían notas positivas, y no sólo por la comparativa con las pérdidas de 220 millones de euros registradas en el mismo periodo del año anterior, sino por la sorprendente mejora del margen financiero o la rápida reducción de los costes operativos.

Y la entidad tiene ante sí la oportunidad de dar nuevas muestras de que lo peor de la aventura británica es ya cosa del pasado. Este próximo lunes, Sabadell presenta el nuevo plan estratégico de TSB y de él se esperan noticias positivas.

Así lo afirma Nuria Álvarez, analista de Renta 4, quien observa que los volúmenes de la filial británica de Sabadell han ido mejorando en los últimos trimestres y que los desarrollos de asuntos como el Brexit -junto a una comparativo bastante asequible- debería permitir a los dirigentes del banco español dibujar una senda de crecimiento en el futuro más inmediato.

Sin embargo, no puede obviarse que el británico no es actualmente un mercado cómodo para un negocio tan enfocado en las hipotecas como el de TSB. "El crecimiento de los ingresos será un desafío en el futuro, dada la lentitud de las incertidumbres macroeconómicas y el Brexit del Reino Unido y el duro panorama competitivo en el mercado hipotecario", admiten en este sentido los analistas de Alantra.

Frente a esto, la firma de análisis resalta el potencial con el que cuenta el banco español para reducir los costes en su filial británica. Ya en la pasada presentación de resultados de Sabadell, el consejero delegado de la entidad, Jaume Guardiola, dejó abierta la puerta a medidas que mejores la eficiencia de TSB, aunque remitió a la presentación de este próximo 25 de noviembre para exponer las medidas a tomar.

Alantra calcula que el banco podría reducir su base de costes hasta en un 20% sin que se notara en sus ingresos

Para los analistas de Alantra esas medidas deben pasar inevitablemente por un ajuste de la estructura operativa del banco en Reino Unido para adaptarse al entorno económico y competitivo. Sabadell ya ha reducido en los últimos doce meses su plantilla en territorio británico en más de 400 personas (en torno al 5% del total) y algunas informaciones apuntan ahora a que podría plantearse otras 400 salidas, junto al cierre de hasta un 20% de sus sucursales (en torno a 100).

Según el informe de la firma de análisis, TSB cuenta ahora mismo con más del 6% de las sucursales bancarias en Reino Unido, frente a una cuota de negocio de entre el 2 y el 3%, y concentra más del 40% de su fuerza laboral en servicios centrales. Teniendo en cuenta todo esto "TSB tiene el potencial para reducir su base de costes hasta en un 20% (con un riesgo limitado de reducción de ingresos) y esto podría elevar el RoTE (el retorno sobre el capital tangible) a niveles más decentes por encima del 7%", indican en Alantra.

Todo esto podría suponer un notable espaldarazo a las proyecciones futuras de Sabadell, una entidad necesitada de buenas nuevas tras años de notorios sufrimientos. Y es que en Alantra calculan que un plan de eficiencia en TSB podría traducirse en una mejora de entre el 15 y el 20% de las estimaciones de beneficios por acción en 2020 y 2021 y un aumento del RoTE de 1,5 puntos porcentuales.

De momento, la entidad que preside Josep Oliu ya ha logrado sacudirse muchos de sus pesares, con una escalada en bolsa superior al 40% en tan sólo tres meses, que le ha permitido situarse en terreno positivo en 2019. Y ofrecer muestras de que el agujero británico está definitivamente cerrado sería la mejor manera de asegurar que esta mejora no sea pasajera.