La Audiencia de Lleida ha condenado a diez años de prisión a un vecino de Lleida de 33 años por un delito continuado de abusos sexuales a su hijastra entre 2010 y 2014, cuando la niña tenía entre 11 y 15 años. Aunque la sentencia puede ser recurrida, la Audiencia ha dictado prisión para el condenado respondiendo a la petición de la Fiscalía, ha informado el Ministerio Público este miércoles.

El tribunal le impone libertad vigilada durante seis años y la prohibición de acercarse menos de 200 metros a la casa o lugar de trabajo de la víctima así como comunicación con ella por cualquier medio durante 11 años y el pago de una indemnización de 9.000 euros.

La sentencia considera probados que los abusos se produjeron en fechas no determinadas entre 2010 y 2014, año en el que acabó la relación de pareja entre el hombre y la madre de la chica. La joven, que sigue terapia en el Centro de Salud Mental y Juvenil, le contó lo que le había pasado a su novio en 2016 y él le ayudó a decírselo a la madre y a denunciar los hechos ante la policía.