La Policía Local de Palma ha abierto una investigación a un conductor que, presuntamente, se saltó un semáforo en rojo y fue sorprendido cuadruplicando la tasa máxima permitida de alcohol en sangre.
Según informa Europa Press, el incidente, que ha generado una notable preocupación entre los vecinos de la zona, pone de nuevo en el foco la importancia del cumplimiento de las normas de tráfico y la tolerancia cero frente a la conducción bajo los efectos del alcohol.
Los hechos ocurrieron en la madrugada del pasado jueves, cuando una patrulla de la Policía Local detectó que un vehículo había cruzado un semáforo en rojo en una de las principales arterias de la ciudad.
Tras interceptar al conductor, los agentes procedieron a realizarle la prueba de alcoholemia, cuyo resultado arrojó una cifra que cuadruplicaba el límite legal establecido para conductores particulares, fijado en 0,25 miligramos por litro de aire espirado.
El conductor, un varón de 38 años, fue trasladado a dependencias policiales, donde se le instruyeron diligencias por un presunto delito contra la seguridad vial. Según fuentes policiales, el individuo presentaba claros síntomas de embriaguez, como dificultad para mantener el equilibrio y alteraciones en el habla.
Además, los agentes comprobaron que el vehículo circulaba sin seguro en vigor, lo que agrava aún más la situación legal del investigado.
La investigación sigue su curso y el caso ha sido remitido al juzgado de guardia, que determinará en los próximos días las medidas cautelares a adoptar.
El conductor podría enfrentarse a una sanción económica significativa, la retirada del permiso de conducir y, en función de la gravedad de los hechos, incluso a una posible pena de prisión, tal como contempla el Código Penal español para los delitos de conducción bajo los efectos del alcohol y desobediencia a las señales de tráfico.
Este suceso vuelve a poner sobre la mesa la necesidad de reforzar los controles y campañas de concienciación sobre los peligros de la conducción bajo los efectos del alcohol.
Las autoridades recuerdan que el consumo de bebidas alcohólicas multiplica el riesgo de accidentes y pone en peligro tanto la vida del conductor como la de otros usuarios de la vía pública.
El Ayuntamiento de Palma ha reiterado su compromiso con la seguridad vial y ha anunciado que intensificará los controles preventivos en los próximos meses, especialmente en zonas de ocio nocturno, para evitar que se repitan episodios similares y garantizar la seguridad de todos los ciudadanos.
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