Un grave accidente de tráfico ha tenido lugar este lunes en la autovía A-62, a la altura del municipio salmantino de Fuentes de Oñoro, cerca de la frontera con Portugal.

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Un autobús que cubría la ruta entre Oporto y Madrid se salió de la vía y volcó, dejando un saldo de nueve personas heridas, entre ellas un menor de edad, según han confirmado fuentes del Servicio de Emergencias 112, según informa Europa Press.

El siniestro ocurrió poco después de las tres de la tarde, en el kilómetro 352 de la autovía, en sentido hacia Salamanca. Por causas que aún se investigan, el vehículo perdió el control y terminó volcado en el margen derecho de la calzada, con varios de sus cristales laterales destrozados.

Los ocupantes, en su mayoría pasajeros que viajaban entre las dos ciudades ibéricas, tuvieron que ser rescatados a través de las puertas de emergencia situadas en el techo del autobús.

Afortunadamente, la mayoría de los heridos presentan lesiones de carácter leve, aunque el susto entre los pasajeros fue considerable. Entre los afectados se encuentra un menor, que fue atendido en el lugar por los servicios sanitarios desplazados, junto al resto de heridos.

Todos ellos fueron trasladados posteriormente a centros hospitalarios cercanos para una evaluación más exhaustiva, aunque su estado no reviste gravedad.

El accidente ha generado importantes retenciones en la autovía A-62, especialmente en el tramo próximo a la frontera con Portugal, mientras los equipos de emergencia y la Guardia Civil trabajaban en la zona para atender a los heridos y retirar el vehículo siniestrado.

Las autoridades han abierto una investigación para esclarecer las causas exactas del vuelco, aunque no se descarta que factores como el estado de la vía o una posible distracción al volante hayan podido influir en el desenlace.

Este incidente pone de nuevo en el foco la seguridad en las carreteras y la importancia de extremar la precaución, especialmente en rutas de largo recorrido como la que une Oporto y Madrid, frecuentada tanto por turistas como por trabajadores transfronterizos.

La rápida intervención de los servicios de emergencia ha sido clave para evitar consecuencias más graves en un accidente que, afortunadamente, no se ha cobrado víctimas mortales.

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