Un códice manuscrito de 1313, que recoge privilegios y concesiones reales a villas y aldeas de Teruel, ha sido recuperado por la Policía Nacional tras una investigación iniciada en la Región de Murcia. El documento, redactado en latín y castellano antiguo sobre papel hispano-árabe, será entregado al Archivo Histórico Provincial de Teruel, donde quedará depositado como bien de titularidad pública y parte del Patrimonio Histórico Español.

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El manuscrito, que estaba en manos de un coleccionista particular que lo cedió voluntariamente y "de buena fe" cuando fue requerido, forma parte de los llamados libros de privilegios concedidos por los reyes de Aragón –Pedro II, Jaime I, Pedro III y Jaime II– a las comunidades rurales turolenses. Según los técnicos del Gobierno de Aragón, el códice permite comprender cómo se organizaban las comunidades medievales, las relaciones entre ciudad y campo y las estructuras de poder local. Contiene más de un centenar de textos agrupados en 195 hojas encuadernadas en 19 fascículos, escritos con letra gótica aragonesa, a varias tintas y con gran cuidado caligráfico.

"Es un vademécum jurídico de la Edad Media", ha explicado Juan José Morales, jefe de sección de Archivos y Museos del Gobierno de Aragón, quien destaca su utilidad en la época como prueba documental en pleitos sobre pastos, aguas o derechos comunales.

Restauración y digitalización

La operación, en la que no ha habido detenciones, ha sido posible gracias al trabajo de la Unidad de Policía Judicial adscrita a la Jefatura Superior de Murcia. El jefe superior, Ignacio del Olmo, ha precisado que el hallazgo se produjo en Elche, donde se tuvo conocimiento de dos manuscritos de interés histórico. El segundo, de carácter privado, pertenece a una familia de Málaga y recopila autos y diligencias notariales entre 1611 y 1800. Este documento seguirá en posesión de sus propietarios bajo las obligaciones legales correspondientes.

La Policía Nacional investiga ahora la procedencia del códice de Teruel y su posible paso por anticuarios o subastas. El Gobierno de Aragón se encargará de su restauración, digitalización y puesta a disposición de investigadores.

"El papel es extraordinariamente recio, prácticamente indestructible", ha señalado Morales. Aunque la encuadernación requerirá intervención, el contenido del códice se conserva en un estado óptimo, capaz de resistir varios siglos más en condiciones adecuadas de conservación.

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