Después de 14 años sin pisar la línea de salida de la Western States 100, Kilian Jornet ha vuelto a dejar huella en la historia de la ultradistancia estadounidense.

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En una edición marcada por el calor extremo y un ritmo de carrera vertiginoso, el catalán ha logrado un brillante tercer puesto, reafirmando su condición de leyenda del trail running mundial.

El regreso de Jornet a Western States ha sido uno de los acontecimientos más esperados de la temporada. En 2011, Kilian conquistó la victoria con un tiempo de 15 horas y 34 minutos, pero este año, pese a mejorar en más de una hora su registro, no ha podido superar a la nueva generación de corredores americanos.

El podio ha estado dominado por Caleb Olson, que se alzó con el triunfo con un tiempo de 14 horas, 11 minutos y 25 segundos, seguido de cerca por Chris Myers (14:17:39) y el propio Jornet, que completó la prueba en 14:19:22.

La carrera fue rápida desde el primer minuto, con un grupo de cabeza que incluyó a Jornet, Olson y Myers. Aunque el español se mantuvo entre los favoritos durante buena parte del recorrido, el calor y el ritmo sostenido le hicieron perder terreno en el ecuador de la prueba.

Sin embargo, Jornet demostró su temple y experiencia, recuperando posiciones en la parte final y acercándose a Myers a escasos dos minutos del final.

El recorrido de la Western States 100 es una auténtica prueba de resistencia y fortaleza mental. Con más de 160 kilómetros y 5.500 metros de desnivel positivo, la carrera atraviesa la Sierra Nevada de California, cruzando cañones donde las temperaturas pueden superar los 40 grados.

A diferencia de las montañas alpinas, donde Jornet se siente como pez en el agua, la Western States exige adaptarse a terrenos más llanos y a condiciones de calor extremo.

La actuación de Jornet ha sido celebrada como una epopeya. A sus 37 años, ha vuelto a demostrar que sigue siendo una referencia mundial, superando a muchos corredores más jóvenes y adaptándose a condiciones poco favorables para él.

Su tercer puesto, 15 años después de su debut en la prueba y 14 años de su victoria, tiene un valor simbólico enorme y refuerza su leyenda.

Kilian Jornet ha reconocido públicamente el esfuerzo de sus rivales y la belleza de competir a este nivel. “Corrí más de una hora más rápido que cuando gané aquí hace 14 años, y ni siquiera esto ha sido suficiente.

Esa es la belleza de competir a este nivel”, ha declarado tras la prueba, felicitando a los ganadores y agradeciendo el apoyo de la comunidad de Western States.

En definitiva, el tercer puesto de Kilian Jornet en la Western States 100 es un hito que va más allá del resultado. Es el testimonio de la evolución del trail running, donde la nueva generación inspirada por figuras como Jornet ha elevado el listón hasta cotas impensables hace unos años.

Y, sobre todo, es la prueba de que la leyenda de Kilian Jornet sigue viva, incluso en terrenos que no le son propicios, según informa Europa Press

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