El presidente de ACS, Florentino Pérez, ha remarcado este viernes ante la Junta General de Accionistas de la compañía la voluntad de reinvertir gran parte de los fondos obtenidos con la venta de su negocio industrial a la francesa Vinci en el desarrollo de activos concesionales.

"Incrementaremos el peso de la actividad concesional mediante la inversión en nuevos proyectos de concesiones de infraestructuras y de renovables, ya sea a través de Iridium, de Abertis y de la empresa conjunta con Vinci", ha señalado el también presidente del Real Madrid durante su discurso ante los accionistas.

Sin embargo, ha evitado referirse a la posible operación de compra de la italiana que controla la familia Benetton a través de Edizione, que tras oponerse al movimiento, lanzó una opa por el 100% de la empresa de la mano de Blackstone.

Por otro lado, Pérez ha explicado que ACS está inmersa en una ordenación de los negocios con Hochtief. En este sentido, ha manifestado la intención del grupo de comprar la participación del 20% menos una acción que tiene su filial alemana en Abertis.

"Vamos a utilizar las dos palancas de crecimiento e inversión de que disponemos: Abertis para los proyectos maduros e Iridium para los nuevos proyectos, concentrándonos en Norteamérica, Australia y Europa, incluyendo España y Alemania, donde somos una referencia sectorial", ha remarcado.

El grupo se volcará con mercados estratégicos para el grupo como Norteamérica, Australia y Europa. En este sentido, ha explicado que ACS se encuentra analizando nuevas oportunidades concesionales de autopistas de peaje en Estados Unidos, de los que ha dicho que "próximamente" habrá novedades.

En la parte de renovables, el acuerdo con Vinci incluyó la creación de una sociedad conjunta para el desarrollo de la cartera de renovables. Se trata de "una importante oportunidad" de inversión, según Pérez, pues va a desarrollar una cartera de activos de energía renovable de al menos 15 GW durante esta década, por los que ACS tiene un derecho de cobro de 600 millones, a razón de 40 millones por cada GW construido.

Juan Santamaría, consejero delegado

La junta de accionistas ha aprobado el nombramiento del actual presidente y consejero delegado de la filial australiana Cimic, Juan Santamaría, como consejero ejecutivo de la compañía. Así, ha podido ser nombrado nuevo consejero delegado del grupo, tras la salida de Marcelino Fernández Verdes en marzo del año pasado.

Pérez ha asegurado que la entrada de Santamaría a la cúpula del el grupo "ayudará a afrontar los actuales retos estratégicos de la empresa y será de gran valor para el conjunto de la compañía".

La constructora también ha aprobado un dividendo de 2 euros por acción, lo que supone lo que representa un incremento del 16% respecto al del año pasado, de 1,72 euros por acción. Los accionistas de ACS también han aprobado, entre otras cosas, la entrada de la consejera independiente María José García Beato, actual consejera de Banco Sabadell; que el número de miembros del consejo quede en quince; y que KPMG sea el auditor de las cuentas del ejercicio 2022.