Las empresas del gran consumo reclaman reformular el modelo laboral español y poner soluciones al fenómeno creciente del absentismo. El presidente de Aecoc, Ignacio González, ha recordado en el 40º congreso que la patronal de fabricantes y distribuidores celebra en Valencia que "cada día faltan a su puesto de trabajo 1,7 millones de trabajadores". En un nivel "un 52% más alto que hace cinco años" y nos cuesta como país "33.000 millones de euros, el PIB de Letonia".

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Según González, la afectación entre las empresas que forman parte de la patronal es superior a la media del 7,5% en la economía general. Entre las compañías asociadas, ha dicho, la tasa es del 8,5% y en las de más de 500 trabajadores supera el 10%.

En el ámbito laboral, el presidente de Aecoc ha reclamado además "poner en marcha un plan de inmigración capacitada y ordenada" que pueda paliar la falta de mano de obra actual y futura en muchas de los puestos de trabajo de las empresas del gran consumo.

"En 2007 y 2008 ya se realizó cuando faltaban profesiones tan técnicas como pescaderos, transportistas o carniceros. Hay que volver a analizar la idea de que la gente venga formada y con un contrato de trabajo cuando llega al país", ha señalado después en rueda de prensa.

En este sentido, ha reclamado "atraer más población activa a través de la formación y no desprenderse del talento senior tan rápido". "Van a salir cinco millones de trabajadores por edad del mercado laboral y solo podemos suplir un tercio", ha alertado. El problema es aún mayor entre los parados mayores de 55 años, donde dos de cada tres son de larga duración y "el 75% cree que no volverá a trabajar", ha rematado.

Por otro lado, ha defendido la necesidad de mejorar la productividad de las empresas. "Es la única manera de mejorar los salarios y el poder adquisitivo de la gente. Subir el salario no sube el salario, solo lo traslada a la inflación", ha advertido en plenas negociaciones del Gobierno con los sindicatos para aplicar una nueva subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI).

Asimismo, ha criticado el actual "clima de confrontación francamente insoportable" que domina el ámbito político. "La inestabilidad, la lejanía de la realidad y la falta de preparación de los gobernantes generan preocupación y falta de confianza tanto dentro como fuera del país", ha criticado González. Por ello, ha reclamado "una clase política que anteponga las soluciones a los problemas de la ciudadanía a sus guerras partidistas".

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