Nadie duda de la importancia y necesidad de que las pequeñas y medianas empresas españolas se digitalicen. Las Administraciones y organizaciones tratan de impulsar esta digitalización. Incluso plantean diferentes planes y ayudas pero, ¿qué dicen las pymes?

Las afectadas son quienes de verdad entienden y conocen qué es lo que necesitan para afrontar estos cambios y sus limitaciones. El “Informe eAPyme 2019 de transformación digital en pymes y autónomos” recoge las peticiones de estas empresas, a ellas mismas y a otros sectores.

Cambios dentro de las propias pymes

El primer problema que tienen las pymes son las reticencias al cambio, dentro de las propias compañías. Estas organizaciones de tamaño pequeño y medio reconocen que deben reforzar la innovación en servicios, así como la explotación de los datos generados. También es importante conocer mejor las necesidades de sus clientes y promover colaboraciones con otras empresas. En definitiva, entender y conseguir que estos cambios sean realmente útiles para el propio negocio.

Peticiones a las empresas TIC

Otras peticiones están dirigidas a las empresas TIC, agentes necesarios para fomentar la digitalización. A ellas, las pymes les solicitan aportar soluciones de sencilla integración y fácil uso, haciendo menos compleja la tarea a todos los trabajadores y directivos, así como que sus estrategias y herramientas estén adaptadas al tamaño y sector de la empresa.

Para la pequeña y mediana empresa también resultan importantes los acuerdos estables y duraderos con estas compañías, que continúen con el refuerzo como agentes dinamizadores y generadores de “conciencia tecnológica” y que “serviticen” la oferta.

También hay recado para la Administración

Las propuestas de la pyme llegan, por supuesto, hasta la Administración. Entre sus peticiones aparecen la convocatoria de ayudas, tanto para llevar a cabo la digitalización como para cursos y formaciones en nuevas tecnologías, o crear préstamos o ayudas con plazos menores de amortización.

Además, también sugieren el impulso del emprendimiento en soluciones sectoriales, instrumentar beneficios fiscales por ahorro energético e implantaciones sostenibles, así como la instauración de iniciativas público-privadas para el aumento del uso de las nuevas tecnologías.

En el mismo informe también recogen una curiosa apreciación, y es que en ningún momento aparece uno de los grandes retos que plantea la digitalización: la ciberseguridad. Según eApyme será necesario tanto la implantación de herramientas y sistemas que ayuden en este aspecto, así como la formación y preparación de las empresas (incluyendo a los propios empleados) para evitar este tipo de ataques.