El Ayuntamiento de Bilbao ha agrupado en un mismo homenaje a las víctimas de ETA, a las víctimas de la "violencia policial", e incluso a miembros de ETA fallecidos en circunstancias con "insuficiente clarificación" en un acto con motivo del 'Día de la Memoria' que se celebra todos los 10 de noviembre. En un acto celebrado ante el monolito del Parque de Doña Casilda de la capital vizcaína, el Consistorio ha recordado a las víctimas del terrorismo registradas en la ciudad, a las que ha recordado junto a los casos como el primer miembro de ETA muerto, Txabi Etxebarrieta, en un tiroteo con la Guardia Civil tras haber asesinado al guardia civil José Antonio Pardines, considerada la primera víctima de ETA.

Etxebarrieta figura como una víctima cuyo caso tendría "insuficiente clarificación" según el informe "Retratos municipales de las vulneraciones del derecho a la vida en el caso vasco " en el que basa su lista de víctimas del Consistorio bilbaíno. En la ofrenda floral que ha tenido lugar esta mañana también se ha incluido junto a las víctimas de ETA casos como los de Iñigo Cabacas, muerto a consecuencia de una pelota de goma lanzada por la Ertzaintza en un callejón de Bilbao, o el caso de Inés Núñez de la Parte, hija de Francisco Javier Núñez, que murió por abusos policiales en 1977.

El acto, promovido por el Foro Bilbao para la Paz y la Convivencia, ha contado con la participación del alcalde de la capital, Juan María Aburto, así como con representantes de todos los partidos políticos, el obispo de Bilbao, Joseba Segura y representantes de la sociedad bilbaína. La ofrenda en recuerdo a las víctimas ha incluido la lectura de un poema a cargo de escolares de dos centros de Bilbao. A continuación se ha llevado a cabo la lectura de los nombres de todas las víctimas del terrorismo y de la violencia política en Bilbao

El informe en el que se basa la lista de víctimas vinculados a Bilbao figura Etxebarrieta a quien se presenta como "miembro de la dirección de ETA", que participó "en su quinta asamblea". Murió el 7 de junio de 1968 a consecuencia de las heridas provocadas en un tiroteo con la Guardia Civil, que le perseguía tras haber asesinado a un agente durante un control de tráfico en Benta Haundi (Tolosa).

El citado informe detalla que se trata de un caso con "insuficiente clarificación y versiones contrapuestas. La información se completa con dos versiones de lo sucedido: "La versión de la Guardia Civil da cuenta de que Etxebarrieta logró sacar su pistola, pero que, antes de que disparara, lograron arrebatársela, y que es cuando Sarasketa disparó su arma cuando se entabló un tiroteo en el que resultó malherido Etxebarrieta. Según otras versiones, a Txabi Etxebarrieta le golpearon la cabeza contra una pared y, al tratar de levantarse, medio inconsciente, un agente le disparó acorta distancia ocurridas en la ciudad", se apunta.

Casos con "insuficiente clarificación"

Etxebarrieta es la primera de las siete víctimas incluidas en este apartado de esclarecimiento insuficiente. También figura el caso de Rafael Quílez Rodríguez, de cuya muerte en 1973 se responsabiliza a la Guardia Civil. Otro de los casos es el de Jesús Urien Orbegozo, cuya versión oficial apuntaba a un suicidio tras huir de la Guardia Civil por sospechas de vinculación con ETA. El caso de Pablo González Larrazabal apunta hacia una muerte por infarto durante una carga policial. Xabier Kalparsoro Golmaio, acusado de pertenecer a ETA, también figura como víctima cuyo caso no ha sido suficientemente clarificado. La hipótesis que se apunta en el informe es que murió tras caer de un segundo piso de una comisaría de la policía mientras era interrogado. La muerte de José Antonio Díaz Losada nunca fue reivindicada por ETA. Su muerte se relacionó con el narcotráfico, sin que se pudieran esclarecer sus circunstancias.

El Día de la Memoria fue instaurado en mayo de 2010 por las instituciones vascas, que eligieron el día 10 de noviembre para esta conmemoración porque en esta fecha no se ha producido nunca ningún atentado mortal.