Alberto Núñez Feijóo se ha mostrado contrario a la decisión el TC de avalar la constitucionalidad de la Ley de Amnistía en respuesta a un recurso presentado por su propio partido. Considera que es "una vergüenza para cualquier demócrata diga lo que diga un TC dividido", reiteró cómo la amnistía es un ejercicio de "corrupción política porque se compró la legislatura" y destacado en varias ocasiones que el negociador de aquello es el hoy imputado por corrupción y ex secretario de Organización socialista Santos Cerdán. En definitiva, la ley avalada por el tribunal de garantías constitucionales presidido por Cándido Conde Pumpido, no por esperada, ha generado menos indignación en Feijóo, es "ilegal y vergonzosa"

Feijóo ha participado este jueves en Bruselas en una reunión del Partido Popular Europeo, previo a la cumbre del Consejo de mañana, donde ha mantenido distintas reuniones con los líderes conservadores como la presidenta de la comisión, Úrsula Von der Layen, y el nuevo canciller alemán, Friedrich Merz. Como era de prever una de las cuestiones que ha centrado las conversaciones ha sido la cumbre e la OTAN de La Haya, con un Pedro Sánchez casi declarado en rebeldía pero que estampó su firma, como el resto, en la declaración que consagra el 5 por ciento del PIB para gasto militar y de defensa.

Según la narración ofrecida por Feijóo al término de la cita, el sentir general de los conservadores europeos se resumía en la expresión "esto no lo hemos visto nunca". Sin querer ahondar en quién ha dicho qué, el líder del PP ha hablado de "conceptos transversales de los que se ha hablado y coincidido" como la manera, ha indicado, de "romper la unidad de Europa en materia de defensa; el doble rasero de firmar una cosa y decir y desdecir lo firmado y la perplejidad por la situación política de corrupción, con prostitutas incluidas".

Feijóo ha incidido en la idea de que más allá de nuestras fronteras se conoce lo que está pasado en España con los casos de corrupción que rodean al jefe del Ejecutivo, de lso que se ha hecho eco toda la prensa europea. "En Europa no sería posible un presidente con todo su entorno investigado por corrupción", ha dicho para llegar a calificar a Sánchez de elemento desestabilizador de Europa para que no se hable de la corrupción de su entorno familiar, de su partido y de su gobierno durante cinco minutos. Intenta mentir a todo el mundo todo el tiempo y le han pillado. Es sanchismo puro, en vena".

Interrogado respecto a cuál es su posición en materia de seguridad tras soslayar su partido en repetidas ocasiones si se suman al 5 por ciento del gasto en defensa, ha explicado que "echaré bien las cuentas y si necesito pedir algún año más de flexibilidad, lo pediría". Al hilo de esta afirmación se ha preguntado cómo es posible que España haya pasado de un gasto de 1,2 por ciento al 2,1 y, en cambio, no pueda llegar al 3,5 (defensa pura) en una década. Todo ello teniendo en cuenta que en 2029 se revisará el acuerdo y "veremos cuales son las necesidades de defensa. Igual han disminuido los riesgos de seguridad que tiene Europa" En todo caso ha invitado a no hacer "demagogia con la seguridad. Seamos previsibles con nuestros socios".

Sobre su reunión de ayer con el líder de Vox, Santiago Abascal, dijo limitarse a una toma de de toma de contacto aunque se abordó la cuestión de la presentación de una moción de censura. Feijóo recordó a su interlocutor que "me faltan cuatro votos" para que prospere. Sigue poniendo la pelota en el tejado de los socios de Sánchez -"cómplices, encubridores y culpables" y admitió, sin más detalles, que está trabajando para conseguir esos cuatro votos. "Si los tengo cuatro la presento mañana", aunque luego ha matizado que julio no sería un buen mes". "Veremos cuando es el momento oportuno y si eso puede prosperar o no. Y en eso estoy trabajando".