El Palacio de Vistalegre se convirtió en el escenario perfecto para una noche inolvidable de motocross freestyle, donde el espectáculo y la adrenalina se fusionaron para dejar boquiabiertos a los asistentes, según informa Europa Press.

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El evento, que reunió a los mejores pilotos internacionales y nacionales, confirmó una vez más el atractivo de esta disciplina entre el público madrileño.

Clinton Moore, reciente ganador del Red Bull X-Fighters World Tour, fue el gran protagonista de la noche. El australiano demostró una vez más su dominio en las rampas, ejecutando saltos imposibles y trucos de gran dificultad técnica que dejaron al jurado sin dudas para otorgarle la victoria.

Moore se impuso sobre una nómina de lujo, entre los que destacaron los españoles Maikel Melero, Dany Torres y José “Mincha”, todos referentes mundiales del freestyle motocross.

La competición estuvo marcada por la emoción y el riesgo. Los pilotos se lanzaron a la pista en dos rondas de saltos individuales, donde elevaron el listón en cada intento. Backflips, Tsunamis, Rock Solids y giros de 360 grados fueron solo algunos de los movimientos que se pudieron ver sobre las rampas, con saltos que superaron los 15 metros de altura.

La audiencia vibró especialmente con los locales, quienes cerraron la exhibición con maniobras arriesgadas y espectaculares, como el doble backflip de Melero, que puso el broche final a la final.

La producción del evento fue espectacular. Luces, efectos especiales y columnas de humo y fuego envolvieron la pista, creando un ambiente único. Además, la música en directo a cargo de DJ Nano aportó la energía necesaria para que el público se sintiera parte del show.

El DJ, conocido por su carisma, incluso se subió a una moto de cross antes de comenzar su sesión, poniendo el punto de diversión y cercanía con los asistentes.

X-Gravity Freestyle Motocross ha marcado el regreso del motocross freestyle a Madrid tras años sin grandes eventos de este tipo. El formato, pensado para toda la familia, combinó deporte de alto nivel, entretenimiento y música, ofreciendo una experiencia memorable para todos los presentes.

El éxito de la cita abre la puerta a futuras ediciones y consolida a Madrid como una de las capitales mundiales de la adrenalina sobre dos ruedas.

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