La sensación de que alguien espiaba las conversaciones del exministro de Transportes José Luis Ábalos sobrevoló en el PSOE, incluso, antes de que el partido llegara al Gobierno en junio de 2018 tras una moción de censura que desbancó al PP de Mariano Rajoy. El que fuera mano derecha de Ábalos en el partido, Santos Cerdán, advirtió en febrero de ese año de que el diputado podía tener el teléfono pinchado y pidió a Koldo García que lo revisara.
El 15 de febrero de 2018 Ábalos ocupaba un escaño en la oposición, pero era todopoderoso dentro de los socialistas pues dirigía la Secretaría de Organización. Cerdán era su 'número dos' como secretario de Coordinación Territorial y Koldo ya trabajaba de la mano del primero tras su aterrizaje desde Navarra.
Cerdán: "Hay que mirar el tf del jefe. Creo que está pinchado", le escribió a Koldo, según consta en los wasaps de la investigación a los que tiene acceso El Independiente.
Koldo: "El de Jose", indica a modo de pregunta.
Cerdán: "Sí"
Koldo: "Hace 25 días no estaba. La batería se le gasta, está mal el altavoz y alguna cosa más, pero es por el teléfono. Se le va a cambiar después del viaje"
Cerdán: "Míralo por si acaso"
Koldo: "Ya he quedado el miércoles que viene. Para que lo vuelvan a mirar"
La investigación que sigue la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil por posibles delitos de organización criminal, tráfico de influencias y cohecho en el Tribunal Supremo ha revelado que los protagonistas del engranaje del partido durante una época tenían continuo temor a que su teléfono estuviera intervenido, si bien no terminan de aclarar por parte de quién.
Años después, en diciembre de 2023, había llovido mucho. Koldo y Cerdán llevaban un año y medio sin hablar porque al secretario de Organización entonces le habían advertido de que el antiguo guardaespaldas estaba investigado en la Fiscalía, pero al retomar la relación el miedo de que les espiaran no había desaparecido.
En la conversación de reconciliación que mantuvieron ambos en una pizzería debajo de la vivienda de Cerdán en Madrid, éste le preguntó: "¿Posibilidad de escuchas?". El navarro le propuso usar 'Signal' para hablar con mayor seguridad, pero desconocía el detalle de que lo hacía falta ningún software que grabara aquella conversación porque tenía delante una persona con una grabadora que estaba registrándolo todo.
Los distintos audios en los que la voz de Cerdán evidencia un reparto de comisiones han sido los pilares sobre los que el juez instructor Leopoldo Puente ha construido la argumentación para enviarlo a prisión provisional donde lleva desde el lunes. La UCO continúa analizando decenas de grabaciones que se recogieron en la vivienda de Koldo García en tres teléfonos iPhone y una grabadora Philips.
De momento, no ha trascendido que el magistrado del Supremo haya acordado escuchas a miembros de la trama, si bien fuentes jurídicas personadas en la causa no descartan que esto pueda haberse hecho en una ramificación de la investigación que permanezca bajo secreto.
Esta era, de hecho, una de las obsesiones en los últimos tiempos de José Luis Ábalos, según contó la mujer que se encontraba con él en su vivienda el día que la Guardia Civil acudió a registrarla. Por eso, dijo, tenía un segundo teléfono con el que hablaba con su entorno más cercano.
También fuentes penitenciarias apuntan a que el temor de Cerdán en la cárcel puede ser el mismo: que sus conversaciones sean escuchadas. Solo así, se explican dichas voces, el trasiego de letrados distintos que ha pasado estos tres días por el centro Penitenciario de Soto del Real (Madrid). "Tres abogados distintos. No es normal. Lo lógico es que hablen por teléfono. Pero pensará que lo tiene pinchado", indican.
Te puede interesar
Lo más visto
Comentarios
Normas ›Para comentar necesitas registrarte a El Independiente. El registro es gratuito y te permitirá comentar en los artículos de El Independiente y recibir por email el boletin diario con las noticias más detacadas.
Regístrate para comentar Ya me he registrado