Alberto Núñez Feijóo ha marcado distancias con Santiago Abascal a raíz de los enfrentamientos racistas desatados en la localidad murciana de Torre Pacheco después de que tres jóvenes marroquíes, ya detenidos, participaran el pasado miércoles en una brutal paliza a un vecino de la localidad. Frente al tono justificatorio del líder de Vox -que en ningún momento ha apelado a la calma y al fin de la violencia-, Feijóo ha difundido un vídeo en el que defiende que "contra los criminales hay que actuar con toda determinación, pero que nadie cuente -apunta- con el Partido Popular para agitar las calles".

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Tras condenar "todo tipo de violencia", ha reclamado "respeto" hacia los inmigrantes residentes en nuestro país y rechazado la actuación de aquellos que "llaman a incumplir la ley bajo la falsa proclama de tomarse la Justicia por la mano". "Esto no va de españoles contra extranjeros ni de PSOE contra VOX, esto va de ciudadanos que quieren vivir en paz, por un lado, y de delincuentes por otro", en alusión a los atacantes del vecino, pretexto por el cual grupos ultras -con el apoyo de los de Abascal y de Alvise Pérez- han llamado a la caza del marroquí.

Defiende que los irregulares que cometan un delito deben ser repatriados "inmediatamente"

El líder del PP también ha cuestionado la actuación del Gobierno, al que acusa de haber renunciado a ejercer la autoridad del Estado y de usar estos disturbios "para tapar sus cesiones al separatismo y su corrupción". También de carecer de política migratoria y de fallar a la hora de "proteger la convivencia" en esta localidad murciana.

Y tras insistir en que "no es responsabilidad de la gente suplantar las carencias de su Gobierno", ha aprovechado para afirmar que, cuando llegue al Gobierno "quien cometa un delito, lo pagará. Si es inmigrante irregular, será repatriado inmediatamente. Y si es nacional, responderá ante la Justicia" y pondrá a disposición de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado" leyes como la de la multirreincidencia

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