El Tribunal Supremo confirma que el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, debe sentarse en el banquillo por un presunto delito de revelación de secretos relacionado con la filtración de los correos de la investigación en la Fiscalía contra el novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, sin embargo, la Sala de Apelación ha decidido archivar el caso para la fiscal jefa de Madrid, Pilar Rodríguez. El alto tribunal por mayoría ha rechazado el recurso del jefe del Ministerio Público que, ahora sí, se confirma que deberá ir a juicio.

Fue el pasado 9 de junio cuando el instructor, que llevaba desde el mes de octubre de 2024 investigando a García Ortiz, decidió concluir la causa y señalar que el principal sospechoso de la publicación en los medios de comunicación de los email que forman parte de las pesquisas contra Alberto González Amador (pareja de Ayuso) en los que éste llegó a admitir, a través de su abogado, un fraude a la Hacienda Pública.

La Sala de lo Penal ha archivado el asunto para la fiscal jefa provincial de Madrid, Pilar Rodríguez, quien, la noche del 13 de marzo de 2024, envió al fiscal general estos correos que, posteriormente, terminaron publicados para desmentir la información que se había aireado sobre que García Ortiz había frenado un supuesto pacto entre González Amador y la Fiscalía.

El magistrado Hurtado sostenía que ambos actuaron "a raíz de indicaciones recibidas de Presidencia […] con la finalidad de ganar el relato". La Fiscalía, dijo el juez, "entró en una dinámica de un frenético intercambio de comunicaciones entre distintos fiscales […] para preparar una respuesta y dejar bien claro" que desde el Ministerio Público no se había frenado ningún acuerdo. Pero la Sala de Apelación considera que no hay indicios suficientes contra ella.

Noticia en ampliación...