El Tribunal Supremo ha condenado al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, por un delito de revelación de secretos a la pena de multa de 12 meses con una cuota diaria de 20 euros e inhabilitación especial para el cargo de Fiscal General del Estado por tiempo de dos años.

Álvaro García Ortiz tendrá que hacer frente al pago de las costas procesales correspondientes incluyendo las de la acusación particular. Asimismo, el ya condenado tendrá que indemnizar al novio de Isabel Díaz Ayuso a 10.000 euros por daños morales.

El fallo del alto tribunal se ha resuelto con los votos a favor de cinco magistrados y dos en contra. Las magistradas Ana María Ferrer y Susana Polo emitirán votos particulares a la sentencia, esto también provoca que la ponencia pase a manos del presidente de la Sala de lo Penal, Andrés Martínez Arrieta.

Asimismo, la Sala ha decidido absolver al fiscal general del resto de delitos objeto de la acusación.

Cabe recordar que las acusaciones pedían hasta seis años de prisión para Álvaro García Ortiz, al considerar que los hechos investigados constituían la comisión de una revelación de secretos grave y que supuso un importante daño a la pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid. El fiscal general ha sido condenado como autor de la filtración de un correo electrónico enviado por el abogado de Alberto González Amador al fiscal de delitos económicos Julián Salto.

Es la primera vez que se condena a un fiscal general en ejercicio. Ahora, se abre un periodo inédito hasta la fecha que comenzará con la inhabilitación de García Ortiz y seguirá con la designación por parte del Gobierno de un nuevo representante máximo para el Ministerio Público. Por su parte, el Ejecutivo ha manifestado que respeta pero que no comparte el auto del tribunal y agradece al salmantino su labor al frente de la Fiscalía.

Juicio histórico

El juicio al fiscal general, que se extendió a lo largo de dos semanas, comenzó el pasado 3 de noviembre con una foto histórica, un acusado escuchando las declaraciones de los testigos desde el estrado. No fue hasta el 12 de noviembre cuando García Ortiz bajó de su ubicación privilegiada para sentarse en el banquillo de los acusados, desde donde defendió su inocencia y la labor de su equipo.

La celebración del juicio dejó varios momentos memorables como el 'enfrentamiento' indirecto entre fiscales o la declaración del novio de Ayuso, quien aseguró que el fiscal general le había arruinado la vida. "O me voy de España o me suicido", llegó a comentar ante el tribunal.

Por su parte, los periodistas encargados de publicar la información objeto de investigación desligaron al máximo representante del Ministerio Público de la filtración. No obstante, y un año después de que el alto tribunal abriese causa contra él, el Supremo le ha condenado por revelación de secretos.