El viernes de la semana pasada la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, dio el aldabonazo al hacer un diagnóstico descarnado de la situación política, lastrada por "la corrupción y los puteros", dijo. Para salir de ese atolladero "insoportable" exigió a Pedro Sánchez una "reformulación radical" del Ejecutivo. Y por si el mensaje no había quedado lo suficiente claro apostilló que "toca un cambio profundo en el equipo de Gobierno".
De la marejada posterior que provocaron dichas palabras dio buena cuenta El Independiente en distintas informaciones sin contar con el recorrido que aún tienen por delante las diferencias, profundas, entre los socios de coalición y Movimiento Sumar internamente. De hecho, hoy mismo delegaciones de PSOE y de los partidos que conforman este espacio se verán las caras en una reunión de trabajo a la que quieren dar perfil bajo después del encontronazo. Pero Díaz no improvisó. Quería lanzar un mensaje potente sobre la necesidad, a su juicio, de que el ala socialista del Gobierno vuelva a tomar impulso sin verse afectado por la crónica judicial y los casos de acoso sexual. No habló de nombres, no citó qué posibles ministros deberían ser 'reformulados' "porque lo importante no es eso. Lo que se necesita primero es un plan de gobierno nuevo. Después ya vendría una remodelación ministerial que haga entendible que hay un cambio y no continuidad", indican fuentes próximas a la vicepresidenta segunda.
Los magentas ya pidieron la dimisión de Rodríguez por no tomar "medidas valientes" en vivienda
Pero aunque las distintas fuentes consultadas insisten en que "en ningún momento" han hablado de nombres ni señalado a nadie, lo cierto es que Sumar pone el foco principalmente en tres miembros del Ejecutivo de los que Sánchez, a su juicio, debiera prescindir. Para empezar, "a nadie se le escapa que no nos gustan las políticas de vivienda por falta de valentía", dicen, para acometer uno de los principales problemas de la sociedad española. Y ese disgusto lo trasladan a la titular de esta cartera, Isabel Rodríguez. De hecho, la portavoz del Grupo Plurinacional de Sumar, Verónica Martínez Barbero, ya le señaló la puerta de salida a la ministra el pasado mes de octubre.
"En materia de vivienda necesitamos medidas serias, medidas valientes y medidas innovadoras. Y mucho nos tememos que Rodríguez, no termina de asumirlo y, por lo tanto, debería dejar paso a quien sí está dispuesto a hacerlo", dijo la portavoz magenta provocando otro movimiento tectónico entre los socios gubernamentales. Buena muestra de que el Ministerio de Vivienda está en el objetivo de Sumar es la broma que esta semana hicieron fuentes de este partido ante un eventual cambio de cartera: "¿Vivienda? No diríamos que no, pero esto no tiene que ver con nosotros".
Enfrentamiento con Robles
La otra ministra que a su juicio deberían abandonar el ejecutivo es la de Defensa, Margarita Robles, que protagonizó una de las réplicas más duras contra Díez -con permiso de Óscar Puente- el pasado lunes. "Lo que le diría a la señora Díaz es que hay mucho que trabajar. Lo que los ciudadanos nos piden es que trabajemos. Determinadas lamentaciones no tienen ningún sentido", dijo con un punto de sarcasmo.
Los magentas creen que el perfil de la titular de Defensa se comparece poco o nada con el de un gobierno de izquierdas, sin contar la cantidad de veces que "nos ha metido en líos en la Comisión Delegada de Asuntos Económicos", en alusión al goteo de incrementos en gasto militar que se van aprobando y que Sumar, ahora, y antes Podemos, han deglutido como quien se come un sapo. Además, tanto en la anterior legislatura como en esta han sido frecuentes sus choques con los socios de Gobierno y ha marcado no pocas veces distancias con el discurso oficial de Moncloa, sobre todo en cuestiones de Justicia.
Hay un ejemplo muy reciente. La que fuera magistrada del Supremo salió en defensa de este Tribunal tras la sentencia condenatoria contra el ya ex fiscal general del Estado Álvaro García Ortiz. Lejos de unirse al coro de críticas del Ejecutivo, con Sánchez a la cabeza, pidió respeto para el poder judicial expresando su "total y absoluta confianza". Y que sin esa confianza en las instituciones "la democracia no funciona", apostilló.
Ley mordaza, balas israelíes, masacre en Melilla...
El titular de Interior, Fernando Grande-Marlaska, es el tercer miembro del Consejo de Ministros en el punto de mira de Sumar, admiten las fuentes consultadas. Enumeran en su 'debe' la compra de balas a Israel; la tragedia de la valla de Melilla de junio de 2022, con varias decenas de inmigrantes muertos en la frontera, y la incumplida reforma de la llamada Ley Mordaza, que duerme el sueño de los justos en el Congreso.
Reprobado varias veces en el Congreso y Senado a propuesta del PP, eso no ha hecho más que reforzarle. Pocos, incluso en el PSOE, daban un duro por su continuidad y ya lleva siete años entrando todos los martes al edificio del Consejo de Ministros del complejo de La Moncloa. Es junto con María Jesús Montero, Félix Bolaños, Luis Planas y Margarita Robles miembro del club de los incombustibles desde 2018. La otra es la propia Yolanda Díaz. "Si Pedro Sánchez quiere mantener a Marlaska, que lo mantenga, pero siempre tras definir una nueva política que aborde cambios", insisten en el espacio Sumar.
La salida de Montoro y Alegría le permitiría a Sánchez aprovechar para una remodelación más amplia
Moncloa ha respondido con un portazo al órdago de la gallega. Sánchez apeló a lo que une a los socios por encima de las discrepancias y dejó claro que no tiene ninguna intención de acometer una crisis de Gobierno. Parece que ni siquiera aprovechará la ventana de oportunidad que, en este sentido, le brinda la salida de la ministra portavoz y de Educación, Pilar Alegría, camino de una candidatura a la presidencia de Aragón, de resultado incierto. También deberá prescindir en unos meses de María Jesús Montero, de vuelta a su tierra para encabezar la lista andaluza a las elecciones autonómicas de junio.
Es cierto que las remodelaciones gubernamentales no se anticipan y que nada impide a Sánchez otro "cambio de opinión", tan frecuentes en él. En Sumar están convencidos de que, finalmente, el inquilino de la Moncloa recapacitará. Y advierten: "Tenemos que cambiar porque si no nos estrellamos contra los arrecifes".
Te puede interesar
Lo más visto
Comentarios
Normas ›Para comentar necesitas registrarte a El Independiente. El registro es gratuito y te permitirá comentar en los artículos de El Independiente y recibir por email el boletin diario con las noticias más detacadas.
Regístrate para comentar Ya me he registrado