Primero fue la gran patronal catalana, Foment del Treball, durante la campaña, quien reclamó evitar bloqueos. Apenas un día después de la cita con las urnas, Pimec se unía a la súplica reclamando celeridad en la formación del nuevo Govern. Y este jueves el Cercle de Economia ha cerrado el círculo en la Nota de Opinión que tradicionalmente precede a la reunión anual en la que reúne a líderes políticos y económicos para analizar a fondo la situación de la economía española. Una nota en la que la entidad reclama "coraje" a los partidos catalanes para "salir del bloque".

Ante el espectáculo de una ERC en crisis abierta y un Carles Puigdemont dispuesto a llevar hasta el final su pulso con los socialistas para conseguir una imposible abstención del PSC a su favor, empresariado y élites económicas reclaman mayorías "sólidas y estables" y evitar una repetición electoral. Elecciones con las que ya amenaza Puigdemont.

Apenas unos minutos después de que Puigdemont lanzara su último órdago, advirtiendo que "están preparados" para la repetición electoral, el presidente del Cercle, Jaume Guardiola, le respondía que "la sociedad está harta".

"Si debido al tacticismo político llegáramos a otras elecciones, esto sería una señal más de distanciamiento de la clase política respecto a la ciudadanía, que ya está harta, y haría perder confianza en la democracia", advertía Guardiola. El presidente del Cercle señaló además lo que ya habían advertido previamente el presidente de Foment, Josep Sánchez Llibre, y el de Pimec, Antoni Cañete: un bloqueo que llevara a unas nuevas elecciones sería "muy malo" para Cataluña.

Incapaces de acabar una legislatura

Guardiola señalaba además que la sociedad catalana vive con la sensación de que sus políticos no son "capaces de acabar ninguna legislatura". Desde 2010 se han sucedido cinco legislaturas autonómicas con una duración media de poco más de dos años y medio, por debajo de los cuatro que marca la "normalidad estatutaria". El presidente del Cercle ha subrayado la necesidad de acabar con esa "excepcionalidad institucional", que "puede tener unos costes muy importantes".

En su Nota, el Cercle subraya el escenario político exige "salir del bloque y pactar con fuerzas que tienen horizontes políticos legítimos y, en algunos aspectos, confrontados". Y reconoce que las urnas han dejado un escenario complejo en el que "no será fácil forjar una mayoría de gobierno", lo que podría llevar a que varios de los principales partidos tengan la "tentación" de convocar una nueva votación.

Sin embargo, resignarse a esa vía para continuar avanzando sería "un mal síntoma", agrega la institución, que urge a los principales actores políticos a forjar mayorías transversales que permitan hacer "políticas ambiciosas". Un discurso que tampoco coincide con la estrategia avanzada por el socialista Salvador Illa, que reclama el apoyo de ERC y Comunes para su investidura y apuesta por un Govern en solitario con pactos puntuales a varias bandas.

Foment y Pimec

Antes incluso de celebrarse las elecciones Foment del Treball ya advirtió contra un escenario de bloqueo. Coincidiendo con la celebración de la asamblea general de la entidad, su presidente reclamó "la máxima responsabilidad a los diputados que salgan escogidos el 12 de mayo para que no se produzca un bloqueo en el Parlament".

Cataluña "no lo aguantaría y los catalanes no nos lo merecemos", añadió Sánchez Llibre, consciente de las dificultades que tendría el PSC para formar gobierno, según los datos que arrojaban las encuestas.

Una vez conocidos los resultados, la patronal Pimec reclamó configurar "con la máxima celeridad un Govern estable y fuerte". Un elemento imprescindible, a juicio de la patronal que preside Cañete, para "dar respuesta a las necesidades del país". El líder de Pimec reclamó además un nuevo ejecutivo dispuesto a llegar "a grandes consensos para asumir los retos que no se pueden seguir obviando como son la financiación, la mejora y creación de infraestructuras que nos hagan competitivos y medidas para impulsar un progreso estable".