Las autoridades han ordenado el confinamiento de casi 3.000 personas que residen en las zonas más próximas al polígono industrial del Callejón de la Gata, en Los Llanos de Aridane (La Palma), al entrar en combustión una fábrica de cementos al contacto con la colada de lava, lo que está provocando emisión de gases.

El director técnico del Plan Especial de Protección frente a Riesgo Volcánico de Canarias (Pevolca), Miguel Ángel Morcuende, ha informado en rueda de prensa que se ha adoptado esta decisión en tanto se analizan los gases y ha especificado que el confinamiento afecta a entre 2.500 y 3.000 personas.

El área confinada la delimita el espacio comprendido entre el cruce del camino de la Cruz Chica con la carretera LP-2, el cruce con Nicolás Brito Pais y la circunvalación hasta la rotonda.

Este espacio incluye toda la zona afectada por el incendio del pasado mes de agosto, hasta el campo de fútbol de El Paso.

El Pevolca decidirá esta tarde si continúa o no el confinamiento en virtud de los análisis de la calidad del aire, ha subrayado su director técnico, que ha indicado que lo más razonable para evitar problemas de salud a la población es insistir en que permanezca en sus viviendas.

Otro delta lávico

La reactivación de la colada que discurre de norte a oeste tras desbordarse el lago de lava del volcán de Cumbre Vieja ha provocado que el flujo de magma se sitúe a unos 300 metros del mar, y puede llegar a formar otro delta lávico o fajana en la playa de Perdido en La Palma.

La portavoz científica del Pevolca, María José Blanco, ha señalado en la rueda de prensa posterior a la reunión de los comités científico y director que la colada sigue arrastrando grandes bloques y, según la estimación de satélite, hasta ayer se ha emitido un volumen de magma de unos 75 millones de metros cúbicos.

Además la altura del penacho de ceniza y gases ha aumentado hasta los 4.000 metros y al menos en las próximas 72 horas su posición puede afectar a las operaciones en el aeropuerto de La Palma.