La oleada de incendios ya ha pasado y apagados los fuegos la importancia de la España vaciada, de la España arrasada por el fuego se ha disipado como el humo. Ante la esta realidad vivida oleada, tras oleada por quienes se dedican al sector forestal vino a Madrid esta semana un nutrido grupo de expertos para dar voz a una propuesta de acción para revitalizar el mundo rural y forestal de nuestro país ante el reto sociológico de su abandono y el climático que pone las condiciones para que los fuegos sean cada vez más intensos y peligrosos.
Convocados por la Fundación Pau Costa, en la Asociación de la Prensa de Madrid, el miércoles pasado, los expertos fueron hablando de las propuestas que en 2023 les llevó un tiempo consensuar. Porque no están en el tema desde este verano. Ingenieros Forestales, de Montes, investigadores, bomberos y ecologistas pusieron en común lo que entre todos consensuaron que necesita la masa forestal española para que tome nota la clase política antes de que las promesas políticas se extingan, si no lo han hecho ya, con la actualidad judicial y parlamentaria de la que se alimentan ellos y la actualidad mediática.
El aviso de los expertos es nítido. Lo que ha pasado este verano volverá a ocurrir. Esto que ya es de por sí es tan grave que debería movilizar los recursos del Estado -estatales, autonómicos y municipales- para evitarlo. Pero el aviso escala a grito: irá a peor, mucho peor, especialmente si no se actúa.
“Nos reunimos en un momento especialmente crítico para nuestro país. En lo que va de 2025, como sabéis, más de 400.000 hectáreas han ardido en España, superando con creces el récord de 2022”, afirmó Luis Berbiela, moderador y ponente de la Fundación Pau Costa. “Hoy, lamentablemente, debemos reconocer con preocupación que poco o nada de lo consensuado se ha traducido en acción política. Mientras tanto, los incendios se agravan, nuestros bosques y pueblos se debilitan y cada verano volvemos a emergencias que ponen en riesgo vidas, infraestructuras y biodiversidad”, aseguró.
La presentación congregó a representantes de numerosas entidades como la Fundación Pau Costa, el Colegio Oficial de Ingenieros de Montes, Greenpeace España y WWF, que expusieron un documento con propuestas estructuradas en siete ejes prioritarios: desde la gestión de ecosistemas forestales hasta la adaptación al cambio climático. “Necesitamos un altavoz, un consenso social y político, y empezar a respetar y valorar el sector primario. No puede ser que para gestionar y prevenir se esté invirtiendo solo un 0,08% del PIB nacional”, denunció Arancha Pérez Oleaga, vicedecana del Colegio de Ingenieros de Montes. “Es el momento de generar un impulso y apostar por gestionar activamente nuestros territorios”.
La situación se agrava año tras año y la planificación a largo plazo es más necesaria que nunca. “Los planes, por su concepto, siempre son proactivos, nunca reactivos. Salir de una crisis empezando con un plan no es lo mejor. Hay que llegar a la crisis con el plan hecho. Por lo tanto, la siguiente crisis vendrá y tenemos que tener el plan preparado”, advirtió Juan Picos, investigador de la Universidad de Vigo.
Las comunidades rurales, en primera línea de riesgo, fueron otro de los focos destacados. “El cambio climático es una lupa y un espejo que ha venido a enseñarnos cómo tenemos nuestro territorio: sin gestionar, colapsado de biomasa, donde hemos perdido nuestro paisaje porque ha desaparecido el paisanaje”, alertó Marta Corella, vicedecana de ingenieros técnicos forestales y alcaldesa de Orea. “La primera medida debe ser acordar políticamente la defensa de la seguridad de la gente que vive en el campo. Eso exige dinero suficiente y planificación para proteger cada núcleo rural”.
Los expertos coincidieron en la importancia de cambiar la percepción social y apostar por una cultura del territorio. “Los bosques no dan wifi, pero producen nuestro aire, nuestra agua y nuestro paisaje, ese donde vamos cuando estamos estresados”, recordó Ferrán Dalmau, ingeniero y director de Medi XXI GSA. Pero su petición es también muy concreta: “Pedimos gestionar el 1% del territorio nacional al año Eso son 280,000 hectáreas. El fuego ya ha gestionado 400,000 este año".
En materia de extinción y conocimiento, Juan Camaño (Fundación Pau Costa) denunció la carencia total de centros de investigación especializados y de sistemas de certificación de competencias para quienes combaten los incendios. “No tenemos un sistema homologado que garantice que las personas que acuden a un incendio tienen las habilidades y conocimientos necesarios. No estamos preparados para los escenarios que tenemos delante”.
Tampoco existe “un diagnóstico del problema, no hay un análisis de riesgo de incendios forestales nacional, no existe ni hay un análisis, ni una predicción de riesgo nacional de incendios forestales, no existe”, afirmó Joaquín Ramírez, ingeniero de montes y director ejecutivo de Tecnosylva. Ramírez visualiza un futuro con incendios más severos y de mayor intensidad, impulsados por el abandono del territorio y el cambio climático. Sin embargo, confía en el conocimiento y la capacidad de la comunidad técnica y social española para proponer soluciones, siempre que exista la voluntad política y un consenso social para aplicar medidas de gestión activa y resiliente del territorio.
Por parte de Greenpeace, la ingeniera forestal Mónica Parrilla subrayó que “el 95% de los incendios son de causa humana. El cambio climático no los origina, pero agrava situaciones de altísima peligrosidad”. Añadió que es imprescindible cumplir la normativa y dotar de recursos a los ayuntamientos rurales para aplicar planes de prevención y emergencia.
“Vivimos una crisis planetaria evidente. La naturaleza está menos resistente tanto a los impactos humanos como a los climáticos”, completó Enrique Segovia, director de conservación de WWF España.
El mensaje de la rueda de prensa estaba muy dirigido a la pasividad política: “Las lecciones vividas solo son eso, algo que nos ha pasado. Pero aprender de las lecciones nos exige actuar, y prevenir es actuar”, sentenció Luis Berbiela. “No podemos dejarnos llevar por medidas coyunturales o anuncios de impacto mediático. Lo que está en juego es la seguridad de la ciudadanía, la preservación de nuestro patrimonio natural y la sostenibilidad de nuestro futuro”.
Te puede interesar
1 Comentarios
Normas ›Para comentar necesitas registrarte a El Independiente. El registro es gratuito y te permitirá comentar en los artículos de El Independiente y recibir por email el boletin diario con las noticias más detacadas.
Regístrate para comentar Ya me he registradoLo más visto
hace 18 minutos
«El Banco de España ha estimado, en concreto, que la fracción de la población residente en zonas urbanas ha aumentado desde el 65% en la década de los años 50 al 87% actual»
Traducido en votos: sólo el 13% de la población no reside en zonas urbanas. ¿Cuántos votos da invertir en lo rural?
Los urbanitas van a salir de fin de con sombrilla todo el año…siempre que no estén cortadas las carreteras o las vías por el fuego o sus consecuencias posteriores