Daniel Sancho espera a que su caso avance en los juzgados de Tailandia tras haber confesado el asesinato y descuartizamiento de Edwin Arrieta. En su defensa, el hijo de Daniel Sancho aseguró que había sido porque el médico le tenía "en una jaula de cristal", le chantajeaba y no quería dejarle en paz. Mientras continúa la investigación, se van conociendo nuevos detalles sobre el fallecido. Ha sido Y ahora Sonsoles quien se ha puesto en contacto con un hombre que denunció al colombiano por acoso y agresión.

Según cuenta esta persona, que se hace llamar Luis, se conocieron en un bar en 2005. Él tenía tenía 25 años. Tras intercambiarse los números de teléfono empezaron a quedar, pero pronto se convirtió en una pesadilla. "Desde el primer día mostró interés sentimental en mí y ha hecho todo lo posible por estar conmigo. Me asusté cuando comenzó a elevar el número de llamadas. Llegó a llamarme hasta 143 veces al día", ha desvelado la víctima, que llegó a presentar una denuncia.

Daniel Sancho en una de las jornadas en las que reconstruía lo ocurrido con la policía de Tailandia
Daniel Sancho en una de las jornadas en las que reconstruía lo ocurrido con la policía de Tailandia

Denuncia que Edwin Arrieta le chantajeaba, amenazaba con matarle, decía que tenía a alguien siguiéndole y decía que montaría un escándalo en su trabajo. Hubo varias peleas y, en una de ellas, el médico colombiano le pegó un mordisco, según cuenta la víctima, y todavía tiene la cicatriz. Alega además que el fallecido "tenía una obsesión" con él. Tuvo incluso que cambiar de "número de móvil y de casa" porque no paraba de llamar.

"Realmente yo me sentí identificado con Daniel cuando vi la noticia. O él me hubiese matado o yo le hubiera matado", añade la víctima en la entrevista, que se emitirá completa este martes a las 18 horas en el programa de Sonsoles Ónega.

Aunque el testimonio ofrece otra visión de cómo era Edwin Arrieta en la intimidad, la abogada de Daniel Sancho, Carmen Balfagón, prefiere mantener la cautela: "A nosotros no nos afecta para nada, no nos afecta. Es un testimonio más que bueno, ahí está, ahí está. Hay que seguir confiando en lo que está haciendo Tailandia en este caso, en la instrucción y en lo que luego se decida".