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Al menos un millón de ucranianos ha abandonado el país desde que el 24 de febrero Vladimir Putin ordenase la invasión del país. Cerca de 800 civiles han perdido la vida y cientos de misiles han mutilado la geografía de Ucrania, golpeando infraestructuras, edificios administrativos, escuelas o hospitales. Un rastro de horror y pérdidas del que queda constancia también a vista de pájaro.
Las imágenes satelitales que acompañan estas líneas, cedidas a El Independiente por Maxar Technologies, completan las cifras y levantan acta de una contienda que ha trastocado millones de vidas en Ucrania y amenaza con ser el mayor conflicto en suelo europeo desde la II Guerra Mundial. Los fotogramas fueron captados en los últimos días, cuando las condiciones atmosféricas lo permitieron.
Las fotografías, procedentes de tres satélites que han auscultado una superficie de 8.000 kilómetros cuadrados, proyectan desde el aire la angustia de multitudes que se arremolinan en los accesos a supermercados en Kiev y otras ciudades del país; la amenazante caravana de blindados rusos que enfila el camino hacia la capital; los intentos de las fuerzas locales de torpedear esa ruta, volando los puentes que existen a su paso; o los cráteres que ha dejado el plomo en zonas residenciales e industriales del país.
Una columna de convoyes militares
Una caravana de blindados rusos en las afueras de la localidad ucraniana de Chernihiv, a 130 kilómetros al noroeste de Kiev. La columna se dirige desde hace días hacia la capital. Fuentes de los servicios de inteligencia estadounidense y británico aseguran que se halla «estancado» por problemas logísticos.
Puente destruido para detener el avance ruso
El ejército ucraniano ha volado hasta tres puentes en dirección a la capital con el objetivo de complicar los progresos de las tropas rusas. En la imagen, puente dañado en la localidad de Chernihiv.
A la búsqueda de víveres
La prolongación del conflicto amenaza con incrementar la escasez de alimentos y la falta de servicios básicos como agua y electricidad. En la fotografía, una larga cola de vecinos de Chernihiv (285.000 habitantes) a las puertas de un supermercado.
Una fábrica reducida a escombros
Los ataques aéreos rusos han alcanzado infraestructuras esenciales así como colegios, hospitales y sedes gubernamentales. En la imagen, los graves daños ocasionados a una fábrica en la periferia occidental de Chernihiv.
Las huellas humeantes del conflicto
Cientos de misiles rusos han caído sobre la geografía de Ucrania desde que comenzara la invasión la semana pasada. En la fotografía, columnas de humo se elevan sobre la localidad de Rivnopillya, en la región de Chernihiv. También son perceptibles los cráteres que ha ocasionado la aviación.
Vehículos y viviendas destruidas
Con los bombardeos sucediéndose sin tregua, Ucrania no ha proporcionado cifras de las pérdidas materiales sufridas hasta ahora. En la fotografía, vehículos militares destruidos y viviendas alcanzadas por el conflicto en una zona residencial de la calle Vokzalna Street, de la localidad de Bucha, al oeste de Kiev.
El drama de los refugiados
Más de un millón de ucranianos han abandonado el país en la última semana, según datos de la ONU. Lo han hecho en coche, a bordo de un tren o a pie. En la fotografía, una caravana formada por coches y personas esperan en el puesto fronterizo de Luzhankam, entre Hungría y Ucrania.
Recepción de refugiados
La huida de la guerra está obligando a los países vecinos y a los organismos de la ONU a poner en marcha una respuesta rápida. En la imagen, un área para la recepción de refugiados en la frontera de Vysne Nemecke, entre Eslovaquia y Ucrania.
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