No salía de su habitación. Lo hizo para ser asesinado nada menos que a manos de su propio padre, que quedó absuelto. Las drogas enloquecieron al gran Marvin Gaye. Fue músico, cantante y productor de soul, smooth soul, quiet storm, blaxploitation y para muchos, entre los que me cuento, uno de los grandes artistas de la música contemporánea. Si no llega a ser por ese disparo de su propio progenitor lanzado contra su pecho aquel 1 de abril de 1984, ahora sería uno de esos artistas de los 80 que siempre son noticia. Al día siguiente, el día 2, hubiese cumplido 81 años.

También estos días recordamos a alguien que nos dejó tal día como el 4 de abril, en 2016: Manolo Tena. Recuerdo entrevistarle en el año olímpico de 1992 bajo la presión de lanzar, cuando había pasado por el infierno del olvido y el fondo del catálogo, el que sería su disco clave: Sangre Española. Antes las discográficas se podían permitir estas cosas: sacar del cajón a una vieja gloria y ponerle a grabar en Estados Unidos con los mejores músicos del planeta. Los homenajes que recibió tras su época de más éxito y sus apariciones televisivas recientes casi le dan su sitio en la música de este país.

Tenebroso club el de los 27: el de los músicos fallecidos a los 27 años de edad

Tras un breve paso por la muerte el 5 de abril en 1998 de Rob Pilatus, cómplice del timo más espectacular de la Historia de la Música llamado Milli Vanilli, hay que aterrizar en la realidad sórdida de un ser único llamado Kurt Cobain, creador de Nirvana. Tenebroso club el de los 27: el de los músicos fallecidos a los 27 años de edad, como Robert Johnson, Brian Jones, Jimi Hendrix, Jim Morrison, Janis Joplin y Amy Winehouse. El 8 de abril de 1994 un empleado de una compañía eléctrica en una reparación doméstica se sorprendió al ver un maniquí o a alguien dormido. Con un disparo en la cabeza no suele dormir nadie, así que dedujo lo que luego se confirmó: el alma del Grunge se había quitado la vida a golpe de escopeta.

Sí, hemos hablado de muertes, ahora que hay tantas. Quizá para demostrar que los que se van dejan siempre una huella indeleble en nosotros y en el mundo que dejan atrás.

En una semana en la que podríamos recordar que un 6 de abril Massiel o ABBA ganaron Eurovisión, que un 7 de abril nació la enorme voz de terciopelo y soul de Billie Holiday o que Miguel Bosé cumplió el día 3 nada menos que 64 años. Bueno, esto tampoco ayuda. Nos hace mayores.