La lucha por BME ha comenzado. Después de meses -si no años- de continuos rumores e informaciones sobre posibles pretendientes para la bolsa española, en la mañana de este lunes, en espacio de unas pocas horas dos de ellos confirmaron movimientos tendentes a hacerse con el hólding español.

Primero fue el grupo paneuropeo Euronext el que anunció la apertura de conversaciones con los responsables de BME para estudiar la viabilidad de una posible oferta. Acto seguido, SIX Group, el gestor de la Bolsa de Suiza, fue un paso más allá, lanzando una opa por valor de 2.843 millones de euros para hacerse con el 100% de sus acciones.

La propuesta de la empresa helvética, de 34 euros por acción, representaba una prima cercana al 34% respecto al precio al que habían cerrado las acciones de BME el pasado viernes. Y, lógicamente, provocó un estrepitoso movimiento en el parqué, motivando una revalorización histórica de las acciones del gestor de la bolsa española, que no sólo convergió al precio ofrecido por SIX, sino que lo rebasó, al sumar un 38% hasta los 35,06 euros.

Fuentes próximas a Euronext aseguran que, pese a la oferta de SIX, mantienen abiertos los contactos con BME

Esta revalorización por encima del precio de la OPA parece apuntar a una conclusión evidente: los inversores apuestan a que Euronext podría mover ficha, lanzando una oferta superior a la propuesta del grupo suizo. No es la única explicación posible, ya que algunos expertos especulan con que, de prosperar la operación, BME podría plantearse entregar un dividendo extraordinario a sus accionistas con el dinero que tiene en caja (alrededor de 280 millones de euros).

Lo que no parece tan claro es que SIX aceptara un 'dispendio' de este tipo sin ajustar el precio de su oferta en idéntica proporción cuando ya en su oferta plantea una rebaja del precio ofrecido cuando BME pague el dividendo que tiene previsto abonar el próximo diciembre.

Más lógico parece, en cambio, esperar que Euronext pueda llegar a plantearse entrar en una batalla con su rival suizo por el negocio de BME. Al fin y al cabo, fuentes próximas al gestor de las bolsas de París, Amsterdam o Bruselas, entre otras, aseguran que las conversaciones iniciadas con la dirección de BME este pasado fin de semana siguen abiertas y que podrían desembocar en una oferta.

Es cierto, que el precio ofrecido por SIX supera las expectativas de los expertos, que estimaban que cualquier propuesta podría situarse en el entorno de los 30 euros, pero hay razones para pensar que Euronext podría estar dispuesto a hacer un esfuerzo para poder adquirir BME.

Y es que como advierten los analistas de Alantra, BME es una de las escasas opciones que quedan de operadores bursátiles independientes que podrían suponer una compra interesante y, además, "adquirir BME tendría mucho sentido para Euronext, ya que habría un potencial de sinergia significativo, proporcionaría a Euronext escala en los servicios post-negociación (liquidación y compensación), donde la dirección de Euronext busca oportunidades de crecimiento", señalan.

Para Euronext, BME supone una de las escasas vías asequibles para crecer en servicios de post-negociación

Desde SIX, no obstante, se muestran confiados en que su propuesta no es fácilmente mejorable. "Tenemos una oferta extremadamente sólida, tanto en el aspecto industrial en términos de combinación de negocios y oportunidades de expansión comercial, como en términos del precio que ofrecemos a los accionistas. Y creemos que es extremadamente competetitivo", aseveraba este lunes el consejero delegado de la firma, Josh Dijsselhof.

Pero la duda siempre esta ahí. No en vano, en el folleto de la OPA, SIX explica que ha acordado con el consejo de BME la aprobación de una comisión "a favor del oferente, en concepto de compensación de gastos asumidos por éste durante el proceso de preparación y formulación de la oferta, por un importe equivalente al 0,50% del importe total de la oferta, que será pagadera por BME al oferente en el supuesto de que, una vez autorizada la oferta por la CNMV, ésta no prosperase por haberse presentado una oferta competidora que tuviese éxito".

Así, la pelota queda ahora en el tejado de Euronext, que tiene en sus manos hacer de la lucha por BME una intensa puja entre dos de los grandes operadores del mercado bursátil europeo. Y quienes hayan apostado por ello podrían verse premiados con un rédito nada desdeñable.