El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, defiende que es necesario "permitir" que las grandes fortunas "puedan ejercer la solidaridad" que requiere la actual crisis, es más, "lo están deseando", ha afirmado. "No creo que les suponga ningún problema un ejercicio de patriotismo fiscal". Iglesias ha hecho estas consideraciones durante una comparecencia en el Senado, en alusión a un asunto que ha vuelto a generar discrepancias en el Gobierno de coalición, dado que el sector socialista del mismo no comparte la propuesta de sustituir el impuesto sobre el patrimonio por una nueva figura fiscal que grave patrimonios superiores al millón de euros, excluida la vivienda habitual.
En todo caso, sí parecen coincidir en que el sistema fiscal "tiene muchos márgenes de mejora. No son suficientemente progresivos", pero otra cosa es que haya unanimidad en torno a si es "necesario un instrumento como una tasa de reconstrucción", que es lo que defiende el vicepresidente segundo.
Por otro lado, ha admitido que "la crisis del Covid actúa como un elemento dinamizador del programa de gobierno. Éste gana pertinencia y urgencia". En una comparecencia que tenía pendiente desde hace meses y no fue posible tras el decreto del estado de alarma, defiende que la actual crisis del coronavirus "está poniendo a prueba nuestra cohesión social y pone de manifiesto la debilidades del modelo social español por los recortes y precarizaciones. Eso nos ha debilitado como país para afrontar la actual situación y no podemos consentir que que esto vuelva a suceder".
Admite que el Covid ha permitido acelerar su programa de gobierno
Considera el vicepresidente segundo que muchos de los objetivos del programa de Gobierno "se han convertido en consensos sociales" y ha vuelto a esgrimir la primacía del "interés general" contenida en una Constitución " que puede representar un mínimo común para trabajar todos juntos".
Ha propuesto en este sentido "un gran acuerdo de país por los derechos sociales", para lo que trabajará personalmente en la comisión de reconstrucción social y económica. Se trata de "un new deal que reconstruya lo común, los servicios públicos y los dispositivos de protección social".
La gestión de las residencias de ancianos será una de las cuestiones a tratar, una vez convertidas éstas en el epicentro de la pandemia del coronavirus. Tras denunciar la primacía numérica de las residencias de capital privado, cree que "deberíamos reflexionar para que el modelo de residencias cambie y esté mejor dotado, con trabajadores públicos que cobre sueldos decentes".
Ingreso Mínimo Vital
Asimismo, ha defendido el Ingreso Mínimo Vital, un dinero, ha dicho, que "no se va a ir a ninguna cuenta de Suiza ni huir de nuestra patria, sino al consumo, para que los autónomos y empresas puedan seguir facturando". Si bien su desarrollo "estaba previsto para más adelante, decidimos acelerar su aprobación para atender a la urgencia sobrevenida con la crisis del Covid". "Quiero agradecer a Escrivá por el excelente trabajo en coordinación con la vicepresidencia. La acción conjunta supondrá un paso histórico en nuestro sistema de protección social que hará de España una referencia a nivel europeo".
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