La teoría del futbolista brasileño Dani Alves, en prisión preventiva por una supuesta agresión sexual a una joven en una discoteca de Barcelona, pierde fuerza. Según ha adelantado El Periódico, las pruebas biológicas han confirmado que los restos de semen en el interior de la joven, en su ropa y en el suelo del lavabo donde se habría producido el crimen, tienen el mismo perfil genético que la muestra de Alves.

La confirmación de la prueba desmonta la última versión del futbolista, ya que aseguró que la relación sexual que se produjo fue una felación consentida de la joven a él, mientras que la confirmación del ADN del brasileño en el interior de la denunciante confirma que hubo penetración, tal y como aqueja la supuesta víctima, que desde un principio apuntó a una violación.

Tres versiones distintas de Dani Alves

Frente a la solidez de la declaración de la joven, se encuentran los titubeos de Alves, que según fuentes judiciales ofreció hasta tres versiones distintas en una comparecencia que apenas duró unos 45 minutos.

A la jueza le dijo que estaba en el baño cuando la chica entró y que no hubo contacto. A la fiscal le matizó que cuando ella entró en el baño él se quedó parado sin saber qué hacer. Y a las preguntas de la acusación particular respondió de forma más detallada atribuyendo la conducta sexual a la víctima. Alves dijo que la chica se le echó encima mientras estaba en el váter haciendo sus necesidades y le practicó una felación. Y que si no había dicho nada hasta entonces era para «protegerla».

El futbolista brasileño se enfrenta a penas de entre cuatro y 12 años de cárcel por la agresión sexual que se investiga.