Aunque para algunos sea un proceso complicado al que, literalmente, enfrentarse (de ahí que se le llame “duelo”), la verdad es que el proceso de ver irse a los seres queridos es algo por lo que cualquier persona debe pasar. Para conmemorar a los que ya no están, muchas culturas tienen sus propias expresiones de despedida: el Día de Todos los Santos en España, Halloween en culturas anglosajonas, el Día de los Muertos en México… Aunque todas ellas son muy antiguas, se han conseguido adaptar a los nuevos tiempos. Así, también se han actualizado los propios procesos funerarios, que se han moldeado a las nuevas realidades y necesidades de las sociedades actuales.

Desde elegir que el ataúd sea biodegradable a que las cenizas sean expuestas en la vitrina de un estadio fútbol, así como planificar un evento temático, las empresas funerarias ofrecen múltiples servicios para planificar la partida de uno mismo. De este modo, es el interesado el que dejará todas estas decisiones tomadas para que sus familiares y amigos lo recuerden como la persona decida.

El auge de estas empresas surge del deseo de muchas personas de que su muerte no suponga complicaciones a sus seres queridos. Además, se pueden tomar muchas decisiones para adaptar el evento a la personalidad y vida de cada persona. El CEO y fundador de una de estas empresas, Pazy, resume su servicio afirmando que facilitan la “personalización y a un precio cerrado”.

Entre el gran abanico de posibilidades que se ofrecen, desde Pazy destacan algunas peticiones que ya han tenido como por ejemplo una experiencia en globo con las cenizas. Otra, pasaba por la digitalización del proceso: a través de un código QR, se podían rememorar fotos del fallecido, así como el seguimiento en streaming del evento funeral.

Las nuevas tendencias en los funerales modernos, en datos

Este último punto, la transformación digital del sector funerario, queda constatado en el último informe de PANASEF (la Asociación Nacional de Servicios Funerarios de España). En él, destacan como cada vez más usuarios y familias gestionan a través de canales digitales el proceso funerario, además de usar estas herramientas para la retransmisión del evento.

Otro dato que refleja las nuevas tendencias y preferencias de las familias, es el auge de las cremaciones. Actualmente, en España las cremaciones ya suponen el 44% de los servicios funerarios, debido al menor impacto medioambiental y la mayor flexibilidad en la planificación de ceremonias. Aún así, España todavía va a la cola del que parece ser la tendencia del futuro, puesto que en el resto de Europa las cremaciones representan más del 80% del total.

Las empresas que gestionan con antelación las ceremonias y servicios funerarios cada vez son más demandas. La facilidad del proceso, el gran abanico de posibilidades y la personalización del proceso, además de ahorrarles decisiones a las personas cercanas cuando a uno le llegue la hora, son las razones que impulsan a cada vez más ciudadanos a confiar en ellas.