Usar el teléfono móvil al volante es una de las infracciones más vigiladas por la Dirección General de Tráfico (DGT). Desde que en 2022 se modificó el Reglamento General de Circulación, la normativa se endureció y dejó muy pocas salidas a quienes quieran seguir conectados sin arriesgarse a ser sancionados. Sin embargo, existe una excepción fundamental que sí permite usar el teléfono móvil mientras se conduce un vehículo sin riesgo de sanción.
¿Cuándo es legal usar el móvil en el coche?
La ley es muy clara: no se podrá utilizar el móvil mientras conducimos salvo que esté anclado en un soporte homologado y que su uso se realice mediante el sistema de manos libres, como puede ser el caso de las llamadas, la navegación mediante GPS o cualquiera de las funcionalidades disponibles en el terminal mediante comandos de voz. En ningún caso se podrá tocar la pantalla o sujetar el móvil con la mano, ni en el caso que se esté parado en un semáforo o bien en una retención.
¿Y si no tienes manos libres? Así debes actuar
Si tu coche no tiene tecnología de manos libres y requieres el uso del móvil de manera urgente, existe una única fórmula para poder hacerlo sin poder vulnerar la ley: parar completamente el vehículo en un lugar seguro de forma que el motor se apague y, además, que no se genere peligro ni obstaculizar el tráfico.
Excepciones con el uso del móvil que no implican sanción
Emergencias justificadas
En situaciones de emergencia, en caso de haber sido testigo o víctima de un accidente, podrás servirte del móvil para contactar a los servicios de emergencia (112), aunque no debas detener el vehículo en su totalidad, y es el único supuesto reconocido en el que este uso estaría justificado sin detener el vehículo. Por otro lado, se recomienda hacerlo, si es posible, con la mayor seguridad.
Vehículos de emergencia
Los conductores de ambulancias, coches policiales, bomberos y otros servicios de emergencia tienen derecho a utilizar el teléfono móvil en el desempeño de la ocupación habitual. Con las garantías de la utilización del mismo y siempre que se realice en el marco de su trabajo habitual y ejecutando los protocolos de seguridad viales y asociados a la utilización del teléfono móvil.
Multar por usar el móvil al volante
El uso indebido del móvil mientras se conduce puede llegar a costarte 200 euros de multa y la detracción de 6 puntos del permiso de conducción. Se trata de uno de los castigos más graves del reglamento, comparable a conducir con unas tasas de alcohol superiores a las permitidas, y no es para menos, pues tal y como indica la DGT, el uso del móvil al volante es uno de los principales factores de siniestralidad en carretera.
Consecuencias legales si hay un accidente
De compartir la responsabilidad en un accidente por no atender a la conducción debido a la influencia del móvil o al ir hablando, las consecuencias pueden ser penales, con la consiguiente denuncia judicial que puede determinarse según la gravedad del mismo, obligando a hacerse cargo de los daños personales o materiales causados.
Cómo evitar distracciones mientras conduces
- Activa el modo "No molestar" al conducir: así evitarás notificaciones innecesarias.
- Utiliza asistentes por voz como Siri o Google Assistant: te permitirán comunicarte sin tocar el móvil.
- Guarda el teléfono fuera de tu vista: el bolsillo o la guantera son buenos aliados.
- Planifica antes de arrancar: configura GPS, llamadas o música antes de ponerte en marcha.
El uso del móvil al volante puede dar la impresión de ser inofensivo en sólo unos segundos, pero es suficiente para provocar un accidente por más que parezca que todo va bien. Si te ves en la necesidad de emplearlo, hazlo sólo si es seguro y está dentro de la ley. La única forma de no ser sancionado es bien clara: manos libres o vehículo completamente parado en un lugar seguro. Puedes poner en riesgo la seguridad propia y la de los demás.
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