El sobrecalentamiento de la batería de una silla de ruedas, causa probable del incendio de la residencia de Zaragoza

La pasada noche, la residencia de mayores DomusVi Zalfonada de Zaragoza sufrió un incendio en el que falleció un hombre de 93 años y otras 21 personas han tenido que ser ingresadas por inhalación de humo. Agentes de Policía Científica, Policía Judicial y del Juzgado de Guardia así como Bomberos mantienen abierta la investigación para determinar la causa del incendio. Pero desde el centro, y a falta del resultado de las diligencias correspondientes, ya se ha apuntado como principal hipótesis el sobrecalentamiento de un cargador eléctrico de la batería de una silla de ruedas como causa desencadenante del humo que obligó al desalojo de 45 residentes.

Así lo ha puesto en conocimiento de los medios de comunicación a las puertas del centro el director de operaciones del grupo DomusVi, David Schuller, quien, en todo caso, ha llamado a la prudencia a la espera de la confirmación por parte de la Policía y los Bomberos: "Creemos que la causa probable es una batería eléctrica de una silla de ruedas en la que se conectó un cargador que no era el original y probablemente fue eso", ha explicado.

El origen de la combustión se localizó en una habitación de la planta baja donde se encontraba el residente que acabó falleciendo junto a otro usuario que sí pudo salir del lugar.

Todos los protocolos funcionaron

Desde la residencia DomusVi Zalfonada asegura que el protocolo de seguridad se activó de inmediato y funcionó correctamente, lo que permitió evacuar el centro con rapidez y en coordinación con los servicios de emergencia y los voluntarios.

Según han detallado fuentes de DomusVi, el centro contaba en ese momento con 133 residentes sobre una capacidad autorizada de 135 plazas, y disponía del personal necesario para la atención nocturna, sin detallar el número exacto de trabajadores.

DomusVi Zalfonada, uno de los tres centros de la compañía en la capital aragonesa, resalta que la actuación de su equipo fue "ejemplar" y más de 30 profesionales de DomusVi acudieron voluntariamente a prestar apoyo, "reflejando el compromiso y la vocación de cuidado" del centro.

Tras el traslado de las personas atendidas, el centro mantiene contacto y realiza un seguimiento cercano tanto con los residentes ingresados y desplazados y con sus familias "para acompañarlas, mantenerlas informadas y transmitirles que su bienestar es nuestra prioridad", trasladan.