Estaba a un paso de alcanzar el estrellato, ya tenía fans esperando en la cola de sus conciertos, coreaban las letras de sus canciones, pero el 2 de marzo de 2017, Ana Isabel García Llorente, más conocida como Gata Cattana, murió a los 25 años por un shock anafiláctico. Han pasado seis años desde entonces, pero sus letras han viajado en el tiempo y la leyenda de la rapera permanece intacta como icono de la música y la lucha feminista.

Desde pequeña había sido una persona inquieta, su interés por la literatura y la poesía empezó muy joven. Entre sus poetas preferidos destacaban Pedro Salinas, Rubén Darío y Javier Egea. Precisamente en sus letras hablaba de sus referentes, como en la canción "Yerma" que hace un guiño a la obra de Federico García Lorca: "Y ahora solo sé de dónde vengo, desde las cumbres de mi Granada, sólo sé de dónde vengo con mi jauría desheredada".

Rubén Darío me envía sus cartas, me dice que no pare, que ahí arriba ya se me está echando en falta"

letra de 'antígona'

Se mudó a Granada para estudiar Ciencias políticas, pero fue años antes cuando entró en contacto con la música. Como cuenta a El Independiente Juanma Sayalonga, codirector del documental Eterna, que aborda la historia de la rapera y se estrena hoy en las salas de cine, "empezó a interesarse por el flamenco antes que por el rap, formó un grupo en su pueblo, en Adamúz (Córdoba), que se llamaba «Aquí pongo la Era», y dio algunos conciertos en los pueblos de alrededor".

En esa etapa adolescente conoció a otra gente y descubrió otra música, ahí empezó a darse cuenta de que lo que gustaba era el rap, pero nunca abandonó del todo el flamenco y siempre acababa mostrando un deje en cada canción. "Ya tenía sus pinitos de antes, pero en Granada empezó a desarrollar aun más su personalidad dentro de lo que es la música. Sacó varios temas y se popularizaron algunos con oraciones más feministas", comenta Sayalonga.

Precisamente es una de las razones por las que se recuerda a la luchadora de injusticias sociales. Sus mensajes feministas se siguen utilizando en manifestaciones, su rostro aparece en varios murales junto a referentes del movimiento como Frida Khalo o Nina Simone, e incluso son citadas por políticos como Íñigo Errejón. "Ella hablaba de igualdad, de justicia social, y lo hacía con unos matices muy clásicos de la cultura griega. Tenía un mensaje muy claro de clase obrera, pero al hacerlo de una manera tan inteligente y sutil, te llevaba a través de las emociones con su música y conseguía atraparte", explica el codirector.

Cuando ella vino con todo su arsenal, cambió el juego y nos descubrió que se podía hacer algo de verdad con poesía"

juanma sayalonga, codirector de 'eterna'

Tras terminar la carrera, se fue a Madrid a estudiar un máster, y es entonces, según cuenta el codirector, que además era amigo de Cata, cuando "empieza a tomárselo más en serio, a trabajar realmente en la música. Ahí tiene su máxima explosión". "La pena es que cuando ella estaba a punto de despegar profesionalmente, murió", añade. Fue en su penúltimo concierto, el 20 de enero de 2017, cuando Sayalonga fue consciente de que "ya tenía un peso en la ciudad. Se agotaron las entradas, la gente coreaba sus canciones, se sabían todas las letras, ahí ella ya estaba forjada".

Ya consolidada como rapera, publicó las maquetas Los siete contra Tebas (2013), Anclas (2015), Inéditos 2015 (2016) y, póstumamente, su álbum Banzai (2017). Su primer poemario fue La escala de Mohs, y más tarde, No vine a ser carta, que se publicó tras su muerte.

La necesidad de contar quién era, qué es lo que había hecho, y sobre todo hacer un homenaje a esa huella que ha dejado tanto en el mundo del rap como en las personas que la conocieron, es lo que impulsó a crear el documental. "Está contado de una manera muy cercana y personal. Hemos intentado que el documental se asemeje a lo que era ella como persona, a su esencia", expone el codirector.

"Yo hago lo que quiero bajo el "Niña no andes sola", mujer en toda regla, poetisa con mayúsculas". - Letra de Lisístrata (2012)

Eterna está contado a través de la gente que la conocía para no caer en el mito del personaje e indagar en la persona que hay detrás. Pero también aparecen voces del mundo de la música, como Mala Rodríguez, Sara Socas, el que fue su DJ, Carlos Esteso o Marcho Márquez. Muchos coinciden en que es una de las artistas más importantes de la escena del rap en los últimos años.

Su discurso era potente, marcado por la filosofía y el feminismo. "Es una figura importante porque dignificó la poesía dentro del rap. Cuando ella estaba haciendo sus temas veníamos de una dinámica de escuchar un estilo de rap en el que había dos vertientes: el vacile, la chulería, y la otra, que eran los raperos más "poetas", ese tipo de temas eran muy banales y rimbombantes. Cuando ella vino con todo su arsenal, cambió el juego y nos descubrió que se podía hacer algo de verdad con poesía", cuenta su amigo.

En aquella época a pesar de que había mujeres dentro del mundo de la música rap, estaba muy masculinizado. "Ella consiguió abrir un hueco en el panorama. Antes las mujeres tenían solo público femenino, y ella consiguió tener muchos seguidores masculinos. A raíz de eso ha abierto puertas a nuevas generaciones", cuenta.

Enriqueció el mensaje con su lenguaje, y eso hizo que la gente fuera consciente de la magia que tenía"

juanma sayalonga, codirector de 'eterna'

Sayalonga sostiene que las chicas que ahora tienen 20 años y tienen otro tipo de referentes en la música urbana, no conocen a Gata y no saben que realmente esas referentes que tienen bebieron de su obra. Y es que son muchas las artistas que se han inspirado en ella, como Sara Socas, Tribade, Queralt Lahoz, Las Ninyas del Corro y Santa Salut.

"No había ni hay una artista dentro de la música rap que tenga los mismos mimbres que ella tenía. Era única. La forma que tenía de expresar su mensaje y de llegar a la gente era atípica, no era un cliché. No utilizaba los mismos mecanismos que se utilizaban de antes". Por eso cree que "enriqueció el mensaje con su lenguaje, y eso hizo que la gente fuera consciente de la magia que tenía".

Pero aunque falleciera con tan solo 25 años, con toda la vida por delante, y dejando en el aire todas las canciones que pudieron ser y finalmente no fueron, su música sigue viva a día de hoy, y Cata, como muestran en el documental Juanma Sayalonga y David Sainz, es eterna.