El verano siempre trae consigo costumbres que se asemejan a otras que parecen repetirse año tras año: el calor, las tardes al aire libre, la reducción de horarios, etc.; pero, sin duda una que siempre vuelve y se disfruta es la sandía. Su frescura y su alto contenido en agua la convierten, sin duda alguna, en la reina de la época, pero ahora un nuevo concepto está haciendo las delicias de aquellos que buscan un giro diferente a su sabor. Un ingrediente muy sorprendente está dando un vuelco a una forma de disfrutar de la fruta que ya se ha hecho viral.

El ácido cítrico en la sandía

Un potenciador natural del sabor

El ácido cítrico es un compuesto que ya está de forma natural en otras frutas como el limón o la lima, y ahora se usa para transformar la sandía. Basta con espolvorear una pequeña cantidad sobre ella para que ésta adquiera un nuevo matiz fresco, equilibrado y mucho menos empalagoso. No es la única alternativa ya que muchas personas les gusta restarle dulzor añadiendo sal o mezclarlas con especias. En el caso del ácido cítrico se añade un nuevo concepto que, sin embargo, mantiene el sabor habitual de la sandía. Sin embargo, el resultado es un sabor fresco que evoca el gusto ácido del limón o de la lima, pero sin perder las propiedades y el dulzor tradicional tan característico de la propia fruta.

Uso del ácido cítrico en la sandía

El ácido cítrico se puede encontrar en forma de un polvo cristalino blanco, y es fácilmente soluble en agua, lo que permite usarlo cómodamente en la cocina. Si bien es un ingrediente que se suele asociar a aplicaciones industriales o de limpieza, hay que tener en cuenta que su uso como ingrediente alimentario está autorizado. Con el simple hecho de espolvorear una pequeña cantidad sobre una rodaja de sandía, será suficiente para percibir de inmediato el cambio de sabor. Su falta de aroma hace que sea un ingrediente sutil que puede sorprender sin modificar la apariencia original de la fruta.

Cantidad óptima para un buen resultado

No es necesario recurrir a altas cantidades de ácido cítrico para alcanzar el efecto deseado. Con tan solo una pizca, la sandía se convierte en un snack mucho más fresco por su sabor equilibrado entre dulce y ácido. La clave está, precisamente, en no ponerle demasiado, ya que el ácido cítrico es muy potente y con poca cantidad se enfatizan las propiedades propias de la fruta.

Una tendencia que arrasa en verano

El aumento de esta tendencia se explica gracias al sabor que ofrece y a que es muy fácil de hacer. El ácido cítrico convierte la fruta común en un postre diferente, perfecto para una reunión, una merienda o para una opción más ligera en esos días de calor.

El ácido cítrico en la cocina actual

El interés por el ácido cítrico también va en aumento porque es también un producto polivalente. Aunque el tipo más conocido a día de hoy es el alimentario, este compuesto se utiliza también en cosmética, farmacología o productos de limpieza. Su valor y su bajo coste lo han canonizado como un ingrediente que va más allá de un truco gastronómico, pero que en la sandía encuentra uno de sus usos más sorprendentes.

Las redes sociales han sido las encargadas de viralizar esta nueva manera de consumir sandía. El ácido cítrico le da un toque diferente, pero siempre conservando su sabor, lo que ha provocado que se popularice una nueva forma de consumir esta fruta de temporada tan consumida en esta época del año.