La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) ha emitido una alerta sanitaria (Ref. ES2025/289) dirigida a personas con alergia o intolerancia a los componentes de la leche, tras detectarse la presencia de este alérgeno no declarado en seis variedades de licores de la marca Mozart, procedentes de Austria. 

Los productos afectados incluyen los sabores Chocolate cream, Chocolate strawberry, Chocolate coffee, White chocolate, Chocolate coconut y Pumpkin spice, envasados en botellas de 500 ml con diseño colorido y conservación a temperatura ambiente.

La alerta fue activada tras una notificación de las autoridades sanitarias de la Comunidad Valenciana, canalizada a través del Sistema Coordinado de Intercambio Rápido de Información (SCIRI), mecanismo europeo diseñado para gestionar riesgos alimentarios. Según la AESAN, los lotes implicados carecen del etiquetado correcto sobre alérgenos, incumpliendo el Reglamento (UE) 1169/2011, que exige destacar sustancias como la leche en la lista de ingredientes. 

Esto representa un riesgo grave para quienes padecen alergias, ya que la ingestión accidental podría desencadenar reacciones adversas.

La distribución de estos licores abarca gran parte del territorio nacional, según los datos recopilados. 

Como medida preventiva, la AESAN ha ordenado la retirada inmediata de los productos de los puntos de venta y recomienda a los consumidores afectados que posean estas botellas en sus hogares que eviten su consumo. 

Para el resto de la población, el consumo no supone ningún peligro, ya que la leche no declarada solo afecta a personas con sensibilidades específicas.

Este incidente subraya la importancia de los sistemas de vigilancia alimentaria como el SCIRI y el RAPEX, que permiten una respuesta rápida ante fallos en el etiquetado. 

Además, refuerza la necesidad de que los operadores alimentarios verifiquen el cumplimiento de la normativa sobre alérgenos, garantizando la seguridad de los consumidores más vulnerables. 

Las autoridades recuerdan que la correcta lectura de las etiquetas sigue siendo esencial para quienes padecen alergias o intolerancias.