Altas temperaturas, aire acondicionado y mayor exposición a pantallas acentúan, durante el verano, los síntomas del síndrome de ojo seco, que cada vez es más frecuente entre la población y que provoca a quienes lo sufren molestias persistentes, visión borrosa y escozor. El aporte de estos factores convierte el verano en una estación crítica para los que lo sufren. La manera de abordar la sintomatología y llevar a cabo una prevención será muy importante para proteger la salud ocular durante los meses más calurosos del año.
Factores que empeoran el ojo seco en verano
El verano suele intensificar la evaporación de la película lagrimal, lo que provoca una reducción en la lubricación natural del ojo. Asimismo, el estar expuestos un tiempo prolongado a ventiladores, aire acondicionado o corrientes de aire puede agravar la sequedad ocular. Todos estos factores pueden ser un problema en la superficie del ojo y pueden originar irritaciones y molestias visuales.
Exposición solar y cloro en piscinas
La radiación solar de forma directa tiene cierta capacidad de provocar irritación ocular y el cloro de las piscinas hace que el pH de la lágrima cambie y deteriora la película ocular. Por lo tanto, la utilización frecuente de gafas de sol certificadas y de gafas de natación tiene un carácter esencial para prevenir que este tipo de factores hagan surgir o intensifiquen los síntomas del ojo seco.
Medidas para aliviar el ojo seco
Durante circunstancias de lecturas largas con un uso intensivo de los medios electrónicos, la frecuencia del parpadeo puede llegar a ser de hasta un 40 % más baja. Practicar más el parpadeo consciente o bien realizar prácticas como cerrar suavemente los ojos durante unos segundos hace bien a la humedad ocular; la regla 20-20-20 también es excelente: cada 20 minutos mirar durante 20 segundos a un objeto que esté a más de 6 metros.
Hidratación y lágrimas artificiales
La hidratación es muy importante para la salud de los ojos. Beber una cantidad importante de agua y utilizar lágrimas artificiales pueden ayudar a que disminuya la sequedad que pueden provocar distintas lesiones de la córnea. Las lágrimas artificiales reponen la película lagrimal y consagran un alivio inmediato de la irritación por el efecto del calor o la exposición prolongada a las pantallas.
Cuidados para prevenir el síndrome de ojo seco
Si queremos sobreponernos cuando el ambiente está demasiado seco es necesario ayudar al ojo debemos echar mano de humidificadores y realizar pausas visuales si nos encontramos en la jornada laboral, ya que nos ayudarán a cuidar el equilibrio de nuestra lágrima natural. Por último debemos ajustar la distancia y posición de las pantallas ya que esto favorece el parpadeo espontáneo y disminuye la tensión de los ojos.
Control de iluminación y protección externa
La luz ambiental tiene que ser difusa y homogénea para evitar reflejos y la fatiga ocular. El uso de las gafas con los filtros adecuados para la protección ocular en el exterior o los impactos de las luces LED ayuda a reducir el riesgo de irritaciones en los ojos y mejora el confort visual del día a día.
La prevención y el tratamiento adecuado del síndrome de ojo seco durante los meses de verano demandan, sobre todo atención sobre los factores ambientales concretos y hábitos visuales. Estos consejos no solo sirven para paliar los síntomas ya que también ayudan a prevenir otras complicaciones en los ojos. Es importante la adopción de rutinas saludables para evitar el riesgo de desarrollar el síndrome de ojo seco, y además, mantener una buena hidratación junto con el uso de gafas de sol durante la exposición a condiciones ambientales. Son pasos de gran importancia desde el punto de vista del cuidado ocular durante los meses cálidos del verano.
Te puede interesar
Lo más visto
Comentarios
Normas ›Para comentar necesitas registrarte a El Independiente. El registro es gratuito y te permitirá comentar en los artículos de El Independiente y recibir por email el boletin diario con las noticias más detacadas.
Regístrate para comentar Ya me he registrado