La Segunda División de España es un territorio hostil. 22 equipos, cuatro plazas de descenso, dos de ascenso directo y cuatro que dan ascenso a playoff configuran una liga cuyos aficionados, en vista de los acontecimientos, la han rebautizado como 'Hiperemociones', ya que su nombre real es Liga Hypermotion.

El gran temor de los más humildes de Primera es caer a la categoría de plata y quedar estancado durante más de una década, como el Real Zaragoza, o encadenar caídas al tercer escalón como Deportivo de La Coruña y Racing de Santander recientemente.

El miedo al infierno contrasta con la ilusión de los aspirantes a ascender, que a su vez conviven con los que pugnan por no abandonar el fútbol profesional. El cóctel resultante es una competición caracterizada por la máxima igualdad. A diferencia de su hermano mayor, que llega a la última jornada con todo decidido, Segunda afronta las dos fechas definitivas con todo abierto.

40 partidos y 120 puntos disputados después, con solo seis por repartir, la Segunda División está plagada de incógnitas. Ningún equipo está matemáticamente descendido ni descendido.

El drama de Segunda División

180 minutos dramáticos. Eso es lo que resta de la fase regular de una liga en la que solo 30 puntos distancian al líder del colista. Por poner en contexto: en Primera esta diferencia es de 61 puntos, más del doble.

El Villarreal B, con 40 puntos, cierra una tabla que todavía le permite soñar con la salvación. Lo mismo le sucede al Andorra, que cuenta con la misma puntuación y se agarra a un milagro un poco más factible para Alcorcón, Amorebieta y Mirandés, y que pretende complicar la situación de Huesca, Eldense y Zaragoza.

El embudo, aunque de distinto tono porque apunta hacia arriba, alcanza desde el Burgos -undécimo clasificado- hasta el Leganés, líder. Los cuatro primeros, Leganés, Real Valladolid, Eibar y Espanyol tienen asegurada su plaza en la promoción, pero no su presencia en Primera División. Tres equipos en dos puntos que parecen destinados a pelean por dos puestos de ascenso directo, ya que el Espanyol está a tres unidades del Eibar y parece condenado a la fase del ko.

Con dos partidos por jugar, los equipos que se agolpan por los billetes libres para el playoff son Racing de Santander, Oviedo, Sporting de Gijón, Elche, Racing de Ferrol, Levante y Burgos. Los empujones por la posibilidad de ascenso son tales que, a dos jornadas del desenlace, el Racing de Santander, quinto, mira a casi la misma distancia al líder -seis puntos- que al frío de los puestos sin premio.