El Ayuntamiento de Madrid ultima un cambio normativo urbanístico en pleno centro de Madrid: se trata de un plan para dotar a un edificio de la Calle de la Montera, en los números 25-27, de “uso comercial” y uso de hospedaje. O lo que es lo mismo, el Consistorio que dirige Manuela Carmena promueve un hotel y un centro comercial, a tiro de piedra ambos de la Puerta del Sol.

Así lo ha sabido El Independiente a través de fuentes del área de Urbanismo, la concejalía que impulsa este plan especial de control urbanístico. El espacio que tendrá la dotación comercial se aproxima a los mil metros cuadrados (una parte de todo el edificio), y ocupará la planta primera. El resto del bloque de 11 plantas, cuya superficie construida supera los 13.500 metros cuadrados, está previsto que sea un hotel.

El de Montera 25-27 no es un edificio al azar: adquirido por el Ayuntamiento por 55 millones de euros en 2007 para revenderlo como hotel de lujo con vistas a futuros Juegos Olímpicos, una operación de la etapa de Alberto Ruiz-Gallardón, el inmueble se convirtió en un quebradero de cabeza para la sucesora de éste, Ana Botella, ya que su valor se desplomó durante la crisis. En 2013 hubo un intento de traspaso por 20 millones menos de lo que costó en 2007. Ahora se busca inversor, sin descartar que el equipo de Gobierno de Ahora Madrid no tenga ya alguna firma en mente.

El edificio de Montera 25-27 fue adquirido en 2007 por 55 millones de euros e incapaz de ser revendido siquiera por el mismo precio.

Según varias fuentes, el equipo de Carmena planea llevarlo a la Comisión de Urbanismo (concejalía que preside José Manuel Calvo) la próxima semana. Urbanismo no ha atendido a las preguntas de este medio. La categoría del hotel o el tipo de centro comercial se desconocen por ahora.

Para justificar el cambio urbanístico, Cibeles alega que un 80% de la actividad de la calle Montera es de uso comercial. Un porcentaje que no sorprende para esta calle con solera salpicada de establecimientos de comida rápida, entre la emblemática Puerta del Sol y la Gran Vía y por la que transitan a diario miles de paseantes y turistas. También es un lugar donde tradicionalmente se ha ejercido la prostitución, venida a menos en los últimos años.