Pongamos que ya ha encontrado su casa ideal, alquilada o comprada, da igual. Una vez decididos, no hay nada que resulte más engorroso que los trámites necesarios para poner a punto su nuevo hogar: pintar las paredes, buscar los muebles para decorar hasta el último rincón, comprar los utensilios necesarios para el día a día y también dar de alta los suministros básicos como el agua, la luz y el gas. Para evitar perderse en los pasos que debemos hacer para dar de alta la luz y el gas natural, les dejamos las pautas para hacerlo de la manera más sencilla posible.

Alta de suministro de gas natural

Darse de alta del suministro de gas natural en nuestro hogar es fácil. Sólo debemos seguir una serie de sencillos pasos que varían en función de si nuestra vivienda dispone o no de instalación de gas natural.

  • Si nuestra casa no dispone de instalación de gas natural, deberemos ponernos en contacto con un instalador autorizado, que realizará la instalación y se encargará de todos los trámites necesarios, al tiempo que nos entregará el Certificado Individual de la Instalación de Gas, un documento con el que podremos ponernos en contacto con la empresa comercializadora.
  • En el caso de que nuestro domicilio ya disponga de una instalación de gas y se trate de una vivienda de primera ocupación, la promotora/constructora deberá entregarnos toda la documentación necesaria para dar de alta el nuevo suministro. Si es una vivienda de segunda mano, habrá que contactar con la empresa comercializadora para confirmar si necesitamos o no el Certificado de Instalación Individual que acredite que la instalación se encuentra en perfecto estado. Si necesitáramos el certificado y no lo tuviéramos, deberíamos ponernos en contacto con un instalador autorizado. Y una vez conseguido, ya podemos ponernos en contacto con la empresa comercializadora para solicitar la contratación del nuevo punto de suministro.

Una vez hayamos realizado los pasos anteriores, tanto si nuestra vivienda disponía de instalación de gas natural como si no, lo siguiente que tenemos que hacer es activar el contrato con la empresa comercializadora.

Tras esto, la comercializadora enviará una solicitud de alta a la distribuidora para que un técnico acuda a nuestro hogar y realice la colocación y conexión del contador, lo cual servirá para activar el contrato y que empecemos a recibir el consumo en nuestras facturas.

 

Alta de suministro de electricidad

Dar de alta la luz tampoco requiere demasiado esfuerzo. Como en la situación anterior, el procedimiento varía en función de si nuestra vivienda ya tiene dada de alta de la luz o no.

  • Si nuestra vivienda cuenta ya con suministro, lo más aconsejable es cambiar la titularidad del contrato a nuestro nombre para evitar los costes que conlleva solicitar una nueva alta de suministro. La solicitud de este cambio puede gestionarla el nuevo titular o el antiguo, aunque en este último caso deberá presentar una autorización firmada por el nuevo conforme le autoriza a hacerlo en su nombre.
  • Si nuestra vivienda no tiene dada de alta la electricidad, debemos hacerlo poniéndonos en contacto con la empresa distribuidora. Tras recibir la solicitud de conexión, la distribuidora gestiona la puesta en servicio. Esto quiere decir que ha conectado nuestra vivienda a la red de distribución eléctrica. Cuando esto ocurra, la distribuidora generará un CUPS (Código Universal del Punto de Suministro de Luz), y con este CUPS ya nos podemos poner en contacto con la comercializadora de energía para firmar el contrato. Una vez activado el contrato, ya podremos disfrutar de la luz en casa.

 


Este contenido ha sido elaborado con la colaboración de Gas Natural Fenosa