El Real Automóvil Club de España (RACE) ha mostrado su oposición a la medida del Gobierno para implantar peajes en todas las autovías españolas en 2024 y agrega que esta medida repercute en el bolsillo de los conductores, que ya aportan cerca de 30.000 millones a las arcas del Estado.

Además, el RACE entiende que implantar el pago por uso en las carreteras puede suponer además un serio peligro ya que muchos conductores podrían optar por buscar vías alternativas gratuitas que son mucho más peligrosas.

Según una encuesta reciente realizada por el club, tres de cada cuatro conductores se oponen a pagar bajo ningún concepto y ocho de cada diez cree que el tráfico se derivará a carreteras secundarias, algunas con déficit de mantenimiento y conservación, y que los conductores estarán más expuestos a la posibilidad de sufrir un accidente de peores consecuencias.

Y es que, es en las carreteras secundarias donde se produce el 78 % de los accidentes mortales.

"Se quiere hacer pagar de nuevo por algo que ya se paga. Hay que recordar que, entre impuestos directos, indirectos y tasas, los conductores contribuyen con 30.000 millones de euros a las arcas del Estado", sostiene el director de Seguridad Vial del RACE, Antonio Lucas, que insiste en que en el caso de instaurarse el pago en las autovías este agravio sería mucho peor.

Además, advierte de que muchos de los transportistas que vean incrementados los costes por llevar su carga acabarán por repercutirlos en el precio final del producto, por lo que la medida no es sólo contra el bolsillo de los conductores, sino el de toda la sociedad.

El Ejecutivo calcula que en 2024 se podría implantar un sistema de pago por uso en la red de carreteras del Estado, que puede ser ampliable al resto de vías, buscando un acuerdo social y político, según recoge en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia remitido a Bruselas. 

El director de la DGT: 'El que lo usa lo paga'

Este miércoles, el director general de Tráfico, Pere Navarro, se mostró partidario este miércoles del peaje en todas las autovías, como estudia el Gobierno y como ocurre en todos los países europeos para pagar su conservación y mantenimiento. "El que lo usa lo paga", ha enfatizado.

Para el responsable de la DGT se trata de "un tema de Estado" en el que hay que "poner el cascabel al gato". En su opinión, imponer un peaje en las vías de alta capacidad no va a obligar al conductor a desviarse a las carreteras convencionales, que ya nadie utiliza para viajes largo, ha dicho.