Nuevo espaldarazo de Repsol a las energías renovables. La compañía ha oficializado a través de un hecho relevante a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que ha modificado la inversión prevista hasta los 19.300 millones de euros para seguir creciendo en la sostenibilidad. Esta cifra supone una inyección de 1.000 millones más a las inversiones previstas.

Según Repsol, la modificación del plan se produce para "aumentar su generación eléctrica renovable y su producción de hidrógeno libre de emisiones, e impulsar otras iniciativas bajas en carbono".

En este sentido, el consejero delegado de la compañía, Josu Jon Imaz, asegura que la "actualización de nuestros objetivos demuestra los sólidos avances que la compañía está alcanzando para ser neutra en carbono en 2050. La ambición, la tecnología y la  ejecución de proyectos nos permiten incrementar la velocidad a  la que llegaremos a este objetivo”. 

Con esta revisión, las energías renovables y de bajas emisiones de carbono supondrán el 35% para el período comprendido entre 2021 y 2025. Dicho incremento permitirán crecer en un 5% en dichas tecnologías respecto al año pasado. Repsol, a su vez, prevé que para el año 2030, sus inversiones en energías limpias sea del 45%.

Por otra parte, Repsol ha aumentado el precio interno de carbono que se aplica toda nueva inversión. En esta actualización, se diferencian precios por tonelada de CO2 para inversiones dentro de la Unión Europea y el resto del mundo.

Así, Repsol ha revisado el coste de los precios del carbono y lo fija en 70 $/t en 2025 y 100 $/t en 2030 para la Unión Europea (los valores anteriores eran de 40 $/t en 2025 y 70 $/t en 2040) y de 60$/t en 2025 en el resto del mundo (anteriormente fijado en 40$/t).

"Establecer un precio de carbono permite diseñar eficientemente los nuevos proyectos y evaluar y tomar decisiones de inversión teniendo en cuenta todas las variables", explica la empresa.

En la misma línea, Repsol ha establecido un objetivo más ambicioso de reducción de la intensidad de  emisiones de metano, fijándola en el 0,20% en 2025. Esto supone una reducción del 85% frente a la  anterior del 25%. 

La compañía ha anunciado también, por primera vez, objetivos absolutos de reducción de emisiones. Así,  establece el compromiso de reducir en 2030 el 55% de las emisiones en activos operados (alcance 1 y  2) y el 30% de las emisiones netas (alcance 1, 2 y 3).

Electricidad limpia

En pleno auge del precio de la luz y con las energéticas parando la producción de energías renovables, Repsol quiere demostrar su compromiso con el medio ambiente y apuesta decididamente por estas tecnologías. En concreto, la compañía prevé que gracias al impulso de las nuevas inversiones se aumente en un 60% su capacidad de generación eléctrica limpia.

Así, en 2025, el nuevo objetivo de capacidad instalada se sitúa en 6 GW,
que comparan con los 5,2 GW de la hoja de ruta presentada en
noviembre de 2020.

Por último, Repsol se ha puesto como objetivo producir unas dos millones de toneladas en combustibles verdes y que emitan menor cantidad de carbono a la atmósfera. Para ello, la energética abrirá un nuevo centro en Cartagena en 2023, que evitará la emisión a la atmósfera de 900.000 toneladas de  CO2 al año.